El Instituto Cervantes proyecta crear el próximo año un Observatorio del Español para el mundo digital, según anunció este lunes su director, Luis García Montero, en la reunión del Patronato de esta institución que han presidido los reyes en el Palacio del Pardo.
Una reunión en la que, como cada año, el Instituto Cervantes rinde cuentas de la labor realizada durante el ejercicio y expone los proyectos que tiene por delante, y en la que el rey de España destacó que el idioma español es «más que enseñar una sintaxis y un diccionario», al representar un conjunto de valores y la diversidad cultural que caracteriza a los pueblos que hablan esta lengua.
Asimismo, el director del Cervantes recalcó que «enseñar un idioma es algo más que enseñar un vocabulario y no hay ningún hablante más extranjero que una máquina» en esta reunión del Patronato.
En la sesión del Patronato participó además el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez; los ministros de Educación, Pilar Alegría, y de Cultura, Miquel Iceta.
Un Patronato especial, ya que la institución celebra su 30 aniversario y porque rinde cuentas de un ejercicio en el que la pandemia afectó al funcionamiento del Cervantes pero que, a pesar del cierre obligado de centros y espacios para exámenes durante meses, solo experimentó un descenso del 14 por ciento respecto a las cifras del año anterior, explicó el director.
El Observatorio del español para el mundo digital, al estilo del Observatorio del Español que funciona en la Universidad de Harvard, es uno de los proyectos del Cervantes cuando el español «entra en juego y en disputa a la hora de programar el lenguaje de las máquinas y la inteligencia artificial», indicó García Montero, que se refirió a las preocupaciones éticas que se suscitan.
«Las máquinas no tienen que heredar los malos usos y los algoritmos deben tratarnos como seres humanos, no como simples cálculos económicos».
Del lenguaje de las máquinas «no solo interesa que nos hablen en buen español cada vez que hagamos una operación informativa, comunicativa o comercial, sino que sus programas respondan a una manera democrática de ver la vida», señaló García Montero.
Además de la transformación digital, otros de los retos del Instituto Cervantes para el próximo ejercicio son su proyección en el África Subsahariana, en Estados Unidos y en Asia.
Y tras la puesta en marcha del centro del Instituto Cervantes en Dakar, que según declaró el director se inaugurará el próximo mes de diciembre, y del que depende el Aula Cervantes abierta en Costa de Marfil, 2022 será el año «de esplendor» en Los Ángeles.
El Cervantes ya alquiló un edificio simbólico en Los Ángeles para albergar su sede (unos antiguos estudios de cine en Hollywood).
Durante el pasado ejercicio económico y a pesar de la pandemia, se pusieron en marcha 14.428 cursos en español y se realizaron 116.569 matrículas en el Instituto Cervantes.
Los candidatos a obtener el Diploma de Español como Lengua Extranjera (DELE) sumaron un total de 116.909, el doble que el curso anterior que fueron 58.912. El más solicitado fue el A2 (35.613 candidatos) por ser el nivel mínimo requerido para adquirir la nacional española.
Además, el Cervantes expidió 13.487 certificados, de los que 8.462 corresponden al Servicio Internacional de Evaluación de la Lengua Española.
En la reunión, a la que asistieron también el director de la RAE, Santiago Muñoz Machado, y los premios Cervantes Sergio Ramírez e Ida Vitale, se entregó el Premio «Ñ» a Barbara Fuchs, profesora de la Universidad de California (UCLA, en Los Ángeles), en reconocimiento a su labor difusora de la lengua española en el mundo. EFE