La consulta verificó que García, en el ocaso tras gobernar dos veces Perú (1985-90 y 2006-11), es desaprobado por 88 por ciento de los encuestados, mientras lo aprueban apenas ocho por ciento.
Detrás en el rechazo de la población se ubica la jefa del partido Fuerza Popular (FP), Keiko Fujimori, con una desaprobación de 81 por ciento y una popularidad de 14 por ciento.
Fujimori cumple prisión preventiva por una investigación por lavado de activos y por un motivo similar está impedido de salir García; situaciones en las que juran inocencia y que inciden en su impopularidad.
En el caso de García, analistas locales coinciden en señalar que las acusaciones de corrupción lastran su imagen desde el fin de su último gobierno, pero su situación se agravó con su derrota en las elecciones de 2016, cuando ocupó el quinto lugar con menos de cinco por ciento de los votos.
Muchos consideran que el ocaso de García se hizo irreversible con su reciente intento de asilo, horas después de que un juez le prohibió salir del país por la indagación en curso y él aseguró que se sometía a la decisión, y con el rechazó de Uruguay al pedido de refugio, por no ser cierto una supuesta persecución, como argüía.
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La decisión uruguaya fue aprobada por 92 por ciento de los peruanos, mientras 79 por ciento no le cree que el gobierno espía sus teléfonos, como afirmó como parte de sus intentos de recuperar vigencia y descollar como opositor al gobierno de Martín Vizcarra.
En cuanto a Fujimori, su impopularidad contrasta con casi la alta votación, cerca de 50 por ciento, que recibió en 2016, y su desgaste se acumula desde entonces por actitudes consideradas autoritarias y favorables a personajes cuestionados por presunta corrupción.
De otro lado, la encuesta de Ipsos verificó que el acaudalado empresario y político provinciano conservador César Acuña, ocupa el tercer lugar en desaprobación ciudadana, con 73 puntos porcentuales.
La aprobación es baja inclusive en quienes tienen mayor aprobación, la que encabeza el centroderechista Julio Guzmán (25 por ciento), seguido por la líder progresista Verónika Mendoza (23,0) y el conservador Alfredo Barnechea, con 19.