BAGDAD.- Un terrorista suicida del Estado Islámico detonó los explosivos que llevaba al final de un partido de fútbol, dejando al menos 25 muertos en el estadio de Iskandariya, un pueblo ubicado al sur de la capital iraquí donde conviven sunitas y chiítas.
La policía iraquí informó que el partido había concluido y «estaban entregando el trofeo a los ganadores cuando el atacante se hizo explotar en medio de la multitud» y, de acuerdo a las evidencias, se trata de un atentado perpetrado por el Estado Islámico.
Una fuente hospitalaria confirmó el balance de al menos 25 muertos y precisó que el ataque tuvo lugar hacia las 19:00 locales (16:00 GMT) en Iskandariya, a 40 kilómetros al sur de Bagdad.
La agencia de noticias Amaq, vinculada al Estado Islámico (ISIS), confirmó que el grupo terrorista había realizado «una operación de martirio (suicida) con un cinturón de explosivos contra una concentración de milicianos».
Este nuevo atentado tiene lugar después de que el Ejército iraquí anunciara el jueves el inicio de la Operación «Al Fatah» para liberar la provincia septentrional de Nínive, cuya capital Mosul es el principal bastión del ISIS en Irak. (ECHA – Agencias)