JERUSALÉN.- Israel rechazó este viernes las críticas que recibió de la ONU, la Unión Europea y su principal aliado, EEUU, tras varios anuncios de ampliación de la construcción en los asentamientos en territorio palestino ocupado.
El portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores, Emmanuel Nahson, señala en su comunicado que las críticas a la edificación de 770 viviendas nuevas «las hicieron a pesar de que saben muy bien que Guiló es un barrio de Jerusalén que será parte de Israel bajo cualquier acuerdo de paz concebible».
«La sugerencia de que construir en Guiló mina la solución basada en dos estados para dos pueblos es objetivamente infundada y distrae del auténtico obstáculo para la paz: la persistente negativa palestina a reconocer un Estado judío en cualquier frontera», añadió la nota.
El pasado miércoles, el Departamento de Estado mostró su «firme oposición» y «profunda preocupación» por la construcción de 1.100 nuevas viviendas en colonias, 770 en Guiló y otras 323 en distintos asentamientos de Jerusalén Este.
«Nos oponemos firmemente a los asentamientos, que son corrosivos para la causa de la paz. Estos pasos de Israel son el último ejemplo de lo que parece ser una aceleración constante de una política que mina las perspectivas de una solución con dos estados», apuntó en un comunicado el departamento que lidera John Kerry.
La nota también criticaba el derribo de viviendas palestinas en Cisjordania y Jerusalén Este, más de 650 en lo que va de año.
El portavoz del Departamento de Estado, John Kirby, señaló que estas medidas «forman parte de un proceso continuo de confiscación de tierras, expansión de asentamientos, legalización de proto-asentamientos y rechazo al desarrollo palestino, que se arriesga a afianzar una realidad de un estado de perpetua ocupación y conflicto«.
Además, calificó la acción de Israel de «provocativa y contraproducente» y señaló que esta «plantea serias dudas sobre su compromiso real con una solución pacífica, negociada con los palestinos». (ECHA- Agencias)