ROMA (Italia).- El Papa Francisco aterrizó hoy en Roma después de visitar durante cuatro días Lituania, Letonia y Estonia, un periplo en el que ha promovido la unidad, la paz y también la integración de las minorías, y que se ha producido 25 años después de la histórica visita de san Juan Pablo II.
El vuelo de la compañía Alitalia aterrizó a las 20:10 hora local (18:10 GMT), con más de hora y media de adelanto, en el aeropuerto romano de Ciampino.
El Papa Francisco pone así fin a este viaje apostólico internacional, que ha realizado tras visitar este año países como Birmania (Myanmar), Bangladesh, Suiza o Irlanda.
Jorge Bergoglio ya tiene programado para el próximo año una visita a Panamá y ha anunciado que le gustaría acudir también a Japón, mientras que el presidente de Mozambique, Filipe Jacinto Nyusi, dijo recientemente que el pontífice irá también al país en el 2019.
Durante su visita a Lituania, el Papa dejó mensajes sobre el recuerdo y el sufrimiento por la represión durante la ocupación soviética y la invasión nazi, pero también la advertencia ante posibles brotes de ideologías peligrosas.
En Letonia, promovió la integración de las minorías ante quienes quieren rechazarlas, por motivos de seguridad o económicos, y en Estonia advirtió del riesgo de «poner toda la confianza en el progreso tecnológico».
#ViajeApostólico #PapaFrancisco en #Estonia: «cuando la fe no tiene miedo de dejar la comodidad y de ponerse en juego, logra manifestar las palabras más hermosas del Maestro: Que os améis unos a otros; como yo os he amado». https://t.co/sricG74hNI pic.twitter.com/7ZxaFTukqK
— Vatican News (@vaticannews_es) September 25, 2018
⊕