TOKIO.- Yoshimasa Hayashi, nuevo ministro de Exteriores nipón, dijo este jueves que Japón aboga por una diplomacia constructiva con China para la estabilidad y paz de la región, al mismo tiempo que defenderá los valores universales.
El Ejecutivo nipón buscará una relación constructiva entre China y Japón por la prosperidad de la región, ha afirmado hoy Hayashi, en lo que ha sido su primera comparecencia como ministro de Exteriores del nuevo Gobierno liderado por Fumio Kishida, investido ayer por segunda vez tras las elecciones generales del mes pasado.
«China es la segunda economía mundial y sus acciones repercuten a nivel internacional, por tanto debe acogerse a las reglas internacionales», afirmó Hayashi, al mismo tiempo que enfatizaba que Japón buscará el diálogo continuo para que Pekín asuma un rol responsable.
Preguntado sobre la postura de Japón ante violaciones de derechos humanos en otros países, Hayashi afirmó «que debemos alzar nuestras voces en contra de estos actos» y «a través del diálogo y la cooperación fomentar los esfuerzos voluntarios».
El nuevo ministro nipón creó hace unos días un nuevo puesto en su Gabinete para hacer frente a estas cuestiones, el de asesor especial en Derechos Humanos y que ha recaído en un antiguo ministro de Defensa, Gen Nakatani.
De acuerdo al canciller nipón, Japón también se centrará en, a través de la diplomacia económica, fortalecer su presencia en asuntos globales como el cambio climático y la respuesta a la pandemia.
El nuevo canciller Hayashi, quien también ocupó las carteras de Educación y de Defensa, presidía hasta ahora una liga parlamentaria de promoción de lazos con China y es visto como favorable al país vecino en el seno de su partido.
Durante la rueda de prensa, Hayashi ha aprovechado para comunicar que abandona su cargo de presidente de esta liga parlamentaria entre China y Japón «para evitar malentendidos» entre los objetivos de esta liga y su nuevo cargo como ministro. EFE