HOUSTON.- Astrónomos estudian mediante el Telescopio Espacial Hubble de la NASA las auroras formadas en uno de los polos del Júpiter gracias a las imágenes obtenidas por la sonda espacial Juno que se acerca al planeta.
Las auroras consisten en impresionantes luces que se observan en la atmósfera de Júpiter cercana a los polos que, al igual que la Tierra, Júpiter también genera.
Las auroras se fotografiaron en una sesión de observación de luz ultravioleta lejana del espectrómetro de imágenes del Hubble. El objetivo del programa es ahora establecer cómo las auroras de Júpiter responden a los cambios en el viento solar: una corriente de partículas cargadas que el Sol emite.
La formación de estas luces se produce cuando las partículas cargadas ubicadas en zonas cercanas al planeta son aceleradas a altas energías a consecuencia del campo magnético generado por Júpiter.
Cuando las partículas hacen contacto con la atmósfera cercana a los polos magnéticos, esta situación provoca una reacción que causa que brillen como gases en un tubo fluorescente.
La misión que cumple la sonda espacial Juno permite a los astrónomos obtener mayores detalles de las condiciones en que se encuentra la atmósfera del planeta y estudiar con mayor profundidad sus cambios y conductas.
Según la NASA, estas auroras son mil veces más brillantes que las registradas en el polo norte en la Tierra.
Foto Nasa