Kinra, El Viaje de Atoqcha, la ópera prima del cineasta cusqueño Marco Panatonic, ya se encuentra en los cines de Lima, Cusco y Arequipa, después de recibir importantes reconocimientos y premios, como el trofeo Astor Piazzola en el Festival de Mar del Plata y seis premios en el Festival de Cine de Lima. La película ha sido muy bien recibida por la crítica local e internacional, destacándose por su enfoque honesto y auténtico de la realidad quechua y andina.
La historia sigue a Atoqcha (que significa «zorrito» en quechua), un joven quechuahablante de Chumbivilcas, quien se embarca en un viaje hacia la ciudad de Cusco en busca de mejores oportunidades. En la capital, es acogido por un amigo y comienza a trabajar, con la intención de estudiar ingeniería. Sin embargo, a pesar de que su vida parece encaminarse, Atoqcha se enfrenta a un dilema interno: su corazón está dividido entre el futuro que está construyendo en la ciudad y su amor por su tierra y su gente. Enfrentado a una decisión crucial, Atoqcha deberá reconciliar su identidad y definir su destino.
El director Marco Panatonic, nacido en Kinra, Chumbivilcas, y también quechuahablante, compartió que la película está inspirada en la experiencia de vida de su abuelo, quien, después de ser injustamente acusado de ladrón en la ciudad, decidió regresar a su tierra natal. «A partir de la reforma agraria, quechuas, aymaras, amazónicos nos hemos asimilado culturalmente hasta cuestionar nuestra identidad, con la excusa de la modernidad», explica Panatonic, quien a través de Kinra busca retratar el conflicto entre lo occidental y lo andino, un tema presente en la realidad peruana. «Soy un desplazado de segunda generación que felizmente aún hablo quechua», añade.
La película no solo aborda la cuestión de la identidad, sino también las dificultades que enfrentan los pueblos andinos en su relación con la modernidad, el racismo y el clasismo. En este sentido, Kinra se distancia de las representaciones estereotipadas del mundo andino, que a menudo lo retratan desde una visión paternalista o idealizada. «KINRA busca contradecir estos estereotipos, reconociendo a las personas no solo como personajes en la película, sino tomando en cuenta sus experiencias de vida como parte de la narrativa», afirma Panatonic.
Los actores naturales de Chumbivilcas, sin experiencia actoral previa, aportaron una autenticidad única a la película, gracias a la dirección sensible y detallada de Panatonic. El elenco incluye a Raúl Challa como Atoqcha, junto a Yuri Choa, Tomasa Sivincha Huamaní, Marcosa Huamaní, Aurelio Quispe, Lisbeth Cabrera y Jorge González, quienes dan vida a los personajes con una interpretación realista y conmovedora.
La película fue realizada con un equipo diverso, conformado por personas de Arequipa, Puno, Cusco y Lima, lo que refuerza el carácter colectivo del proyecto. En la parte técnica, Kinra contó con la dirección y guion de Marco Panatonic, producción general de Walter Manrique, y la fotografía de Alberto Flores y Pierre Pastor. La distribución está a cargo de V&R Films.
Kinra, El Viaje de Atoqcha es una obra que no solo representa a miles de jóvenes quechuahablantes, sino que también celebra la fuerza de la identidad andina y su conexión con la tierra. La película ofrece una mirada profunda y sin adornos sobre la vida cotidiana en las comunidades andinas, mostrando el espíritu colectivo, la solidaridad y el respeto por la naturaleza.
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