ROMA.- El presidente de la Federación Internacional de la Cruz Roja (FICR), el italiano Francesco Rocca, denunció hoy la «miopía» de los países occidentales respecto a la vacunación en el mundo, porque la «lentitud» de este proceso a nivel global «tendrá repercusiones también en Occidente».
«Si se abandonan países en la campaña de vacunación, se desarrollarán variantes del virus no cubiertas por las vacunas», advirtió Rocca en un encuentro virtual con la prensa extranjera en Roma y añadió que lo «más racional» es «cubrir según la vulnerabilidad, dando prioridad a la población más débil a nivel global».
Rocca, que es también presidente de Cruz Roja Italiana, aseguró que para «detener la pandemia se debe actuar de forma global, si lo que se quiere es volver a la normalidad», por lo que se debe vacunar en todo el mundo, sea desde un punto de vista «humanitario» o «egoísta».
Por ello, criticó la distribución de las vacunas en el mundo: «el 50 % de las dosis a día de hoy se han distribuido en siete países», mientras el resto se reparten el otro 50 % y «solo el 1 % llega a los países menos afortunados, los que viven la mayor dificultad y las crisis más importantes».
En ese sentido, Rocca afirmó que el mecanismo Covax de la Organización Mundial de la Salud para donar vacunas y repartirlas entre los países con menos recursos, al que está adherido la FICR, «va, pero con lentitud».
El número de dosis que se reparte a través de esta iniciativa es «absolutamente insuficiente para cubrir las necesidades globales», lo que hace pensar que «si esta es la tendencia, el año de la normalidad no será el 2022».
Expresó que «la salud global no puede estar en manos de la especulación» y dijo que, aunque «obviamente ha habido costes de desarrollo» para los laboratorios, «la vacuna es un bien común«.
«Hablo a título personal, pero me parece extremadamente molesta esta situación», lamentó el presidente de la FICR sobre la distribución desigual a nivel internacional de la vacuna. EFE