MOSCÚ.- El laboratorio multiusos ruso Nauka se acopló este jueves con éxito a la Estación Espacial Internacional (EEI), donde ocupará el lugar del módulo Pirs, hundido en el océano Pacífico después de veinte años de servicio.
El acoplamiento del nuevo módulo a la plataforma orbital tras ocho días de vuelo autónomo tuvo lugar a las 16.29 hora de Moscú (13.29 GMT) cuando la EEI volaba sobre el este de Kazajistán, según la transmisión en directo de la agencia espacial rusa, Roscosmos.
Nauka, con el brazo robótico de la Agencia Espacial Europea (ESA), despegó rumbo a la EEI el 21 de julio, con catorce años de retraso.
El laboratorio ruso -de 13 metros de longitud, 4,2 metro de diámetro en su parte más ancha y un volumen presurizado de 70 metros cúbicos- cuenta con cinco puertos de enganche, tres de ellos en un adaptador de acoplamiento presurizado en forma de esfera, y con su propio sistema de propulsión.
Rusia espera ampliar considerablemente la capacidad de investigación de su segmento de la EEI con la llegada del nuevo módulo, que está provisto de treinta lugares de trabajo, dieciséis en su exterior y catorce en su interior, y permitirá efectuar nuevos experimentos en distintos campos.
Naúka se acopló a la EEI al primer intento, pese a las preocupaciones que generó un problema en los motores del módulo.
El jueves Roscosmos informó de que expertos estaban verificando el funcionamiento del equipamiento a bordo del laboratorio multiuso, dado que experimentó problemas en el encendido de sus motores, con el riesgo de no llegar a la plataforma orbital.
Sin embargo, la agencia espacial rusa aseguró más tarde que las pruebas del sistema de propulsión de Naúka transcurrieron de manera normal. EFE