La mina Las Bambas, una de las grandes productoras de cobre de Latinoamérica, paralizó totalmente sus operaciones en Perú ante las protestas de pobladores que bloquean desde hace un mes el llamado corredor minero del sur peruano, entre las regiones de Cusco y Apurímac.
La decisión llevó a que este sábado los vehículos de alto tonelaje permanecieran en los estacionamientos del gran campamento minero y todos los equipos no fueron encendidos, informó la emisora RPP.
Además, un grupo de trabajadores se alistaba para abandonar la zona después de que las comunidades campesinas de la localidad de Chumbivilcas, en la región de Cusco, acordaran desbloquear momentáneamente el corredor para que puedan salir del lugar.
Este «paso humanitario» de trabajadores se realizará hasta este domingo para permitir que unas 140 personas sean evacuadas.
La paralización total de las operaciones fue confirmada por el gerente general de la mina, Álvaro Ossio, quien luego de participar durante la noche de este viernes en una reunión con el presidente de Perú, Pedro Castillo, ratificó que «no hay marcha atrás en la decisión».
«Los trabajos en el yacimiento se detendrán este 18 de diciembre. El presidente fue receptivo, está sumamente preocupado. Nos ha expresado el compromiso de promover un diálogo constructivo», acotó.
Al respecto, el abogado Víctor Villa, asesor legal de las comunidades que protestan, aseguró que esperan que la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) interceda en el conflicto y convoque a una reunión para retomar el diálogo.
Las Bambas: Se evalúa desalojo de manifestantes, afirma premier
La PCM anunció, a su turno, que un equipo de su Secretaría de Diálogo partió hacia la zona para «materializar el pase humanitario, dejar salir a trabajadores y permitir el ingreso de un grupo mínimo para actividades críticas y evitar impactos ambientales».
Esta semana, la presidenta del Consejo de Ministros, Mirtha Vásquez, manifestó su preocupación por la paralización de las operaciones y dijo que el Gobierno espera que en los próximos días se logre un «acuerdo mínimo» entre la minera y las comunidades.
«Estamos acompañando este proceso, tratando de animar a la comunidad para que revise estas propuestas que la empresa viene haciendo y pedir que se establezcan algunos puntos de consenso», dijo.
Sin embargo, la patronal minera peruana también responsabilizó al Gobierno del izquierdista Pedro Castillo de los anuncios de paralización de actividades hechos por varias empresas mineras por no actuar contra los reiterados bloqueos de rutas y tomas de carreteras que impiden la explotación de los yacimientos.
Las protestas tienen como protagonista principal a Las Bambas, donde se produce el 2 % del suministro global de cobre, a la que exigen indemnizaciones por daños y perjuicios por impactos ambientales, sociales y culturales y el pago de derechos de servidumbre minera, debido al daño que causa en su comunidad el tránsito diario de camiones pesados cargados con el mineral.
Ese tránsito no estaba contemplado en los planes con los que se habilitó inicialmente el proyecto minero, en el que se preveía la construcción de un «mineroducto» para extraer el mineral de la zona, que luego fue dejado de lado.
Carlos Castro, gerente de Asuntos Corporativos y Desarrollo de Negocios de Las Bambas, detalló que, a raíz de estos bloqueos, hay más de 75.000 familias afectadas y cerca de 3.000 trabajadores que no pueden regresar a sus hogares.
Las Bambas: Gobierno prevé ‘acuerdo mínimo’ en siguientes días
En ese sentido, demandó una «pronta solución» al Gobierno y una mayor flexibilidad a los comuneros quienes, según dijo, exigen «contratos de servicios logísticos en niveles que resultan inviables» y «rechazan sistemáticamente» las propuestas de la empresa.
Castro estimó que, debido a este conflicto, Las Bambas «a duras penas» alcanzará este 2021 las 300.000 toneladas de concentrados de cobre, unos niveles lejos de su capacidad productiva, que bordean las 400.000 toneladas.
EFE- Foto referencial – internet-medios