BUENOS AIRES.- Un papelón en la Copa Libertadores. Un superclásico donde perdió el fútbol. Lo que debería haber sido una fiesta, terminó empañado porque los jugadores de River Plate, al salir a jugar el segundo tiempo contra Boca Juniors que iba 0 a 0, fueron afectados por gas pimienta. Y el árbitro Darío Herrera, luego de unos eternos e incomprensibles 70 minutos, decidió suspender el partido.
La CONMEBOL debe anunciar a la brevedad si continuará el encuentro, y por ende cuando, y la sanción que recibirá Boca por este escándalo.
Leonardo Ponzio, Matías Kranevitter y Ramiro Funes Mori fueron los jugadores más afectados de River. Justo en el momento en que salían por el túnel para jugar el segundo tiempo, recibieron la agresión, que también afectó a otros jugadores.
Con la espalda quemada por el gas lanzado desde la platea a la ventilación de la manga, Ponzio sostuvo que tenía «todo el cuerpo afectado y no solamente los ojos». Por su parte Leonel Vangioni resaltó que la «irritación en la vista es muy dolorosa», al tiempo que mostraba a la prensa su espalda enrojecida.
El árbitro Herrera anunció la suspensión del partido.
— Boca Jrs. Oficial (@BocaJrsOficial) Mayo 15, 2015
«Es vergonzozo, es lamentable. Los jugadores no estaban bien, es lamentable. Esperamos una hora y pico que tomaran una decisión, es lamentable», señaló Gallardo.
La prueba. La policía labró un acta y se llevó las camisetas que tenían los rastros del gas pimienta, ya que se realizó una denuncia.