WASHINGTON.- Los líderes demócratas del Congreso clamaron este jueves por la destitución del presidente saliente de EE.UU., Donald Trump, después del caos vivido la víspera en Washington DC, donde una turba de seguidores del mandatario irrumpió en el Capitolio en unos hechos que se saldaron con cuatro muertos.
«Insto al vicepresidente (Pence) a que destituya de inmediato al presidente invocando la Enmienda 25. Si el vicepresidente y el Gabinete no lo hacen, el Congreso puede estar preparado para salir adelante con un juicio político», apuntó la presidenta de la Cámara Baja, la demócrata Nancy Pelosi, en una rueda de prensa.
Pelosi indicó que Trump «incitó una insurrección armada contra EE.UU.»: «Una profanación del Capitolio de EE.UU., que es el templo de EE.UU., de nuestra democracia estadounidense y de la violencia que tuvo como blanco el Congreso».
El miércoles, cientos de seguidores de Trump, que no ha reconocido su derrota en las elecciones al alegar sin pruebas que hubo un fraude, irrumpieron en el Capitolio durante una sesión conjunta de ambas cámaras, cuando iban a contar los votos del Colegio Electoral y ratificar la victoria del demócrata Joe Biden en los comicios del 3 de noviembre, en unos actos en los que cuatro personas murieron.
ENMIENDA 25 O SOBRE LA INCAPACIDAD DEL PRESIDENTE
Durante la jornada de ayer, Trump tuiteó justificando la actitud de sus seguidores y en un momento dado les pidió que fueran «pacíficos», poco antes de que la red social decidiera suspender temporalmente su cuenta.
Además, Trump culpó a su vicepresidente, Mike Pence, que presidía la sesión en el Congreso, del caos generado por no haberse otorgado poderes que no le concede la Constitución para revocar la victoria electoral de Biden durante la sesión legislativa.
En sus declaraciones, Pelosi hizo referencia a la Enmienda 25 de la Carta Magna de EE.UU., que regula los casos de incapacidad del presidente y su sucesión.
Para invocar dicha enmienda se necesitaría que el vicepresidente, en este caso Pence, y una mayoría del Gobierno vote para destituir a Trump, alegando su incapacidad «para ejercer los poderes y deberes del cargo», en un paso sin precedentes.
En una rueda de prensa, el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, reveló que él y Pelosi habían llamado a Pence para convencerle de que invoque esa enmienda para destituir a Trump, pese a que solo quedan días para la investidura de Biden, el próximo 20 de enero.
«Estuvimos en espera (al teléfono) durante 25 minutos y entonces nos dijeron que el vicepresidente no se pondría al teléfono, así que lo estamos haciendo público, porque debería hacerlo y hacerlo de inmediato (invocar la enmienda 25)», dijo Schumer.
El senador demócrata consideró que si ni Pence ni el Gabinete actúan para echar a Trump de la Casa Blanca, el Congreso debería reunirse para iniciar un juicio político contra Trump tan pronto como sea posible.
En ese sentido, Pelosi destacó en su propia intervención ante los periodistas que el mandatario saliente es «una persona muy peligrosa que no debería continuar en el puesto».
«Esto es urgente. Esta es una emergencia de la mayor magnitud», dijo.
REPUBLICANOS, CRÍTICOS CON TRUMP
Mientras, crecen las voces entre los republicanos críticas con la conducta de Trump.
Uno de ellos es uno de sus principales aliados en el Congreso, el senador Lindsey Graham, quien lamentó que los logros de Trump en estos cuatro años se hayan visto ensombrecidos por lo ocurrido el miércoles.
El asalto al Capitolio «será una parte importante de su Presidencia. Es una herida autoinflingida. Fue ir demasiado lejos», opinó Graham.
Por su parte, el gobernador republicano de Maryland, Larry Hogan, fue más contundente y aseguró este jueves que Trump debería ser destituido.
«Creo que no hay duda de que EE.UU. estaría mejor si el presidente dimitiera o fuera destituido del cargo, y si Mike Pence, el vicepresidente de EE.UU. dirigiera una transición pacífica del poder durante los próximos 13 días hasta que el presidente Biden jure», resaltó.
En paralelo al debate político, las investigaciones sobre los sucesos en el Capitolio avanzan y este jueves el fiscal general de EE.UU. en funciones, Michael Sherwin, no descartó que Trump pueda ser procesado por los mismos.
Preguntado por un periodista durante una llamada con la prensa sobre si estaban llevando pesquisas sobre el papel de Trump, Sherwin respondió: «Estamos mirando a todos los actores aquí y a todo el mundo que tuvo un papel, y si las pruebas se ajustan a los elementos del delito, van a ser imputados».
Desde la Casa Blanca, su portavoz, Kayleigh McEnany, quiso desvincular al presidente y al Gobierno de los disturbios: «Aquellos que asediaron violentamente nuestro Capitolio son lo opuesto a todo lo que esta Administración defiende», dijo McEnany en una breve declaración a la prensa.
«La violencia que vimos ayer en el Capitolio de nuestra nación fue terrible, reprobable y contraria a la manera estadounidense. La condenamos, el presidente y esta Administración, en los términos más enérgicos posibles», indicó McEnany.
Esto no ha impedido que las deserciones de la Casa Blanca de Trump comiencen y este jueves la secretaria de Transporte, Elaine Chao, anunció su dimisión.
Chao, casada con el líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, es el primer miembro del gabinete presidencial que dimite tras los altercados del miércoles y apenas a dos semanas de que Trump concluya su mandato.
EFE/ Video Todo Noticias