Antoine Griezmann se encargó de hacer los deberes del Atlético en Riazor (1-2), aunque el cuadro de Simeone sufrió un susto final cuando el partido parecía de lo más plácido, ya sin el francés sobre el césped.
Dos goles suyos dan al Atlético un pequeño colchón en la lucha por la tercera plaza. Fue un duelo tranquilo durante 75 minutos, con Griezmann como gran protagonista. El delantero, que suma ya 20 goles, hizo los dos tantos al primer toque, el primero de ellos bellísimo, una tijera que dejó a Fabricio con el molde.
El segundo llegó tras un saque de banda de Gámez, otra de las armas del Atlético de un tiempo a esta parte. Simeone quitó a Arda y Griezmann pensando en el derbi y el Deportivo descontó por medio de Oriol Riera.
Sufrió el Atlético al final, pero terminó llegando a la orilla sano y salvo. Tres puntos más, cuatro de ventaja sobre el Valencia, a esperar lo que haga el Sevilla y a pensar en la Champions.