LONDRES/Reino Unido.- El gobierno del Reino Unido advirtió hoy de que el fracaso de los partidos norirlandeses para formar un Ejecutivo de poder compartido tendrá consecuencias «profundas y serias» para la provincia británica.
A pocas horas de que se cumpla mañana el plazo dado para que las formaciones logren un acuerdo, el ministro británico para Irlanda del Norte, James Brokenshire, volvió a plantear la opción de la suspensión de la autonomía, que pasaría a ser gobernada directamente por Londres, o la convocatoria de otras elecciones regionales, cuatro meses después de la ultima cita con las urnas.
«Nuestros esfuerzos se centran en lograr que se restaure el Ejecutivo (de Belfast) y he dejado claro que no quiero dar por hecho lo que ocurrirá si eso no pasa. Pero, obviamente, habrá consecuencias profundas y graves en ese sentido», dijo el ministro en el Parlamento de Westminster.
El probritánico Partido Democrático Unionista (DUP) y el nacionalista Sinn Fein, los más votados en los pasados comicios, negocian hoy para pactar, antes de las 15.00 horas GMT de mañana, sus candidatos al puesto de ministro y viceministro principal del gobierno de poder compartido entre protestantes y católicos.
El Sinn Fein, antiguo brazo político del ya inactivo IRA, acusa a los unionistas de oponerse a la introducción de leyes que protejan a la lengua gaélica, que permitan el matrimonio homosexual y que velen por los derechos de otras minorías de la provincia.
Ambas formaciones también discrepan respecto al legado del pasado conflicto y los mecanismos para investigar los crímenes cometidos tanto por los paramilitares como por las fuerzas de seguridad durante ese periodo.
Asimismo, los republicanos se niegan a compartir gobierno con el DUP mientras se investiga el papel desempeñado por su líder y exministra principal Arlene Foster en un caso de corrupción detectado en la política de energías renovables durante la pasada legislatura.
El DUP apoya a May a cambio de inversión en Irlanda del Norte
Este escándalo financiero llevó al adjunto de Foster, el histórico dirigente del Sinn Fein Martin McGuinness, ya fallecido, a presentar su dimisión del último Ejecutivo el pasado enero, lo que obligó a Londres a convocar unas elecciones dos meses después.
El DUP, por su parte, acusa a los nacionalistas de «dramatizar la situación» y ha dejado entrever que podría ceder ante ciertas demandas si el Sinn Fein elimina su veto a Foster y hay acuerdo mañana mismo.
El jefe negociador unionista, Edwin Poots, ha insistido en que la prioridad ahora es formar gobierno cuanto antes para comenzar a «distribuir el dinero» que el DUP ha «recibido con éxito del gobierno» del Reino Unido.
El dirigente protestante hacía referencia a los fondos extra concedidos por la primera ministra británica, la conservadora Theresa May, a cambio del apoyo de los parlamentarios del DUP en Londres, clave para mantenerse en el poder tras perder su mayoría en las elecciones generales del pasado 8 de junio.
EFE/Foto: adnradio.cl