CIUDAD DE MÉXICO.- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, defendió este viernes que el gobierno lucha por la igualdad de derechos entre hombres y mujeres, de quienes dijo que son más decididas, trabajadoras y honradas que los hombres.
En una acto en el Palacio Nacional para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, el mandatario mexicano celebró el papel de la mujeres para acabar con el régimen corrupto que dijo había en México hasta que él mismo asumió el poder el 1 de diciembre pasado.
«La mujer es más decidida, más trabajadora, más honrada que el hombre; es fundamental para la vida pública del país», sostuvo López Obrador, quien dijo que no va a «tolerar una injusticia ni en contra de un hombre ni de una mujer».
Ante decenas de mujeres representantes de diversos sectores de la sociedad, el presidente mexicano y líder del izquierdista Movimiento Regeneración Nacional (Morena) aseveró que «siempre vamos a estar luchando por la igualdad».
Sin embargo, gran parte de su discurso lo dedicó a hablar sobre su plan de gobierno, al que llama «la cuarta transformación de la vida pública de México» después de la Independencia, las reformas liberales del siglo XIX y la Revolución mexicana, en lugar del movimiento feminista.
El presidente destacó que la victoria de la izquierda en las elecciones del año pasado fue posible gracias a la unión de muchos otros movimientos, como el obrero y el campesino.
«Cada quien se ocupaba de su movimiento, nos ensimismábamos en nuestras causas. Veíamos el árbol pero no el bosque», dijo el presidente al destacar que el único adversario común era el gobierno «opresor» y «neoliberal» imperante.
Celebró que todos los movimientos sociales se unieran para «cambiar el régimen corrupto», al que algunas de las mujeres presentes en el acto añadieron a gritos el adjetivo de «patriarcal».
López Obrador finalizó apuntando que «las libertades no se imploran, se conquistan» y dijo que bajo su mandato el Palacio Nacional, sede del Ejecutivo, «es de todo el pueblo y de todas las mujeres».
Por su parte, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, se mostró orgullosa de ser la primera mujer en ejercer este cargo, pero lamentó que 66 % de las mujeres de México hayan sufrido episodios de violencia.
«Vamos a continuar trabajando con pasión y con solidaridad y justicia para que en el futuro la defensa para ampliar las libertades sea una realidad en los derechos reproductivos, de participación política y en otros campos de la vida profesional», sostuvo.
La directora del Instituto Nacional de la Mujer, Nadine Gasman, homenajeó «a las generaciones de niñas, jóvenes y adultas que tuvieron que superar las barreras que el patriarcado ha sembrado en todos los rincones del planeta».
Destacó que México es «una patria forjada también por mujeres» al presentar el nuevo logo del Gobierno mexicano que muestra a seis mujeres destacadas de la historia del país: la escritora sor Juana Inés de la Cruz, las líderes independentistas Leona Vicario y Josefa Ortiz de Domínguez, la revolucionaria Carmen Serdán y la sufragista Elvia Carrillo Puerto.
Asimismo, solicitó una «aplicación correcta», eficaz y transparente de los recursos públicos dedicados a políticas de igualdad de género.
En las últimas semanas, ha estallado una grave polémica con la decisión de López Obrador de paralizar la entrega de recursos al programa de albergues para mujeres que han sido víctimas de violencia.
El gobierno sostiene que quieren evitar la entrega de recursos a organizaciones sociales que gestionan estos centros y que han actuado de manera corrupta, una versión negada por organismos defensores de derechos humanos.
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