Hay héroes anónimos que no se dan a conocer, y no es tampoco el propósito de hacerse notar, cuando se trata de desprenderse de lo poco que tienen para ayudar al prójimo.
Son ganadores de medallas de oro que en los Juegos Panamericanos Lima 2019 no subieron al podio pero se merecen al menos un reconocimiento de esta historia que debe ser imitada.
Se trata de los alumnos del Quinto C de secundaria del Colegio José Olaya de Chorrillos que al lado de sus padres dedican su descanso de fin de semana a repartir raciones de comida a indigentes de los distintos rincones de la capital.
Marcelo Torres, alumno del referido centro de estudios, señala que la iniciativa partió del profesor Reyber Navarrete quien comprometió a los alumnos del 5to C y padres de familia preparar las raciones.
“El dinero lo aportan los padres de familia y ellos mismos preparan los platillos aparte de recorrer las calles en busca de personas que no tienen cómo alimentarse”.
“Los padres son increíbles, les dan la comida en la boca como gesto de humildad y ejemplo a seguir para que los jóvenes tengan un aprendizaje a mano de cómo se ayuda al prójimo”, dice Marcelo Torres.
Texto y fotos/Crónica Viva
Hugo Laredo Medina