La pensión que cobra un exparlamentario es hasta 12 veces mayor que la de un jubilado de la ONP. En promedio, los excongresistas reciben S/ 6.300 de pensión gracias a la antigua ley de cédula viva. Mientras que un exaportante al sistema nacional de pensiones cobra como mínimo S/ 500 y máximo S/ 893.
Según su portal de transparencia, al mes el Congreso gasta S/ 1.033.068,85 para pagar la jubilación de 164 exparlamentarios. El monto es el doble en los meses de Fiestas Patrias y Navidad, pues los exparlamentarios reciben aguinaldo. Por ejemplo, en julio, el Legislativo destinó S/ 2.058.173,53.
Entre los beneficiados figuran políticos conocidos como la expresidenta del Congreso y excongresista de Fuerza Popular (FP) Luz Salgado, quien de acuerdo a estos reportes recibe una pensión de S/ 5.313,28. La República buscó comunicarse con ella, pero al cierre de esta nota no respondió.
También figuran en el registro sus excolegas fujimoristas Martha Hildebrandt, con S/ 7.452; Óscar Andrés Reggiardo, con S/ 8.600; y Víctor Paredes Guerra, con S/ 8.224,62. Reggiardo Sayán es padre del excandidato a la alcaldía de Lima Renzo Reggiardo y fundador del partido Perú Patria Segura. Paredes, por su parte, además de congresista, fue ministro en la dictadura de Alberto Fujimori y candidato al Parlamento este año con FP, sin éxito.
Del Apra están la exlegisladora Mercedes Cabanillas, quien recibe S/ 7.392; el exabogado de Alan García, Moisés Tambini del Valle, con S/ 5.390,28; y el exministro de Pesquería Rómulo León Alegría, con S/ 5.071,29. El abogado de León, José Orrego, precisó que su patrocinado actualmente se encuentra en un litigio contra el Legislativo para adecuar su jubilación a la Cédula Viva y que, por ahora, recibe solo S/ 4.000.
También es beneficiado con este sistema el excongresista y fundador de Juntos por el Perú (JP) Yehude Simon. Su pensión es de S/ 5.129,82. “Todos los que tenían 20 años de servicio al Estado reciben ello. Yo tengo 35 años de servicio. En líquido me dan S/ 4.800”, indicó.
De igual modo, el exdiputado acciopopulista Edmundo del Águila Morote recibe una pensión de S/ 5.462,28. “La cédula viva es un sistema antiguo. Se iba ajustando conforme al aumento de sueldos. Después se quedó congelada”, señaló.
Su correligionaria, exparlamentaria y presidenta del Comité Electoral de AP, Doris Guerrero, es otra beneficiada con dicho régimen con S/ 7.984,45.
Hay otros exdiputados que ocuparon altos cargos en proyectos de infraestructura importantes, como María Cristala Constatinides Rosado, quien fue vicepresidenta del Consejo Directivo de Pasto Grande, en Moquegua, en representación del Ministerio de Agricultura.
En lo que va del año, mientras los congresistas discuten la reforma del sistema nacional y privado de pensiones, las arcas del Legislativo han destinado más de S/ 8 millones para solventar la jubilación de exlegisladores.
Privilegios modificados
La Ley 20530, conocida como la de la cédula viva, permitía que sus afiliados se jubilen teniendo 20 años de aportes y recibiendo el salario que percibieron en su último puesto laboral en el Estado. Eso se prestó para muchas maniobras.
“Tu pensión era tu último sueldo. Para algunos eso significó que su último trabajo era de congresista y con eso completaban la cantidad de años. Algunos abrían la cédula viva y luego la cerraban. Era una repartija”, recordó el economista Farid Matuk.
En el 2004, el Parlamento aprobó una reforma constitucional para derogar este régimen. El Colegio de Abogados del Cusco interpuso una demanda ante el Tribunal Constitucional (TC), pero fue declarada infundada.
Luego el pleno del Parlamento dio luz verde a una ley para reglamentar el nuevo régimen estipulando que, en vista de que la derogación de la norma no puede perjudicar a sus afiliados de manera retroactiva, habrá un tope de 2 UIT (S/ 8.600) para los futuros pensionistas.
“Porque antes recibían lo que ganaron en su último trabajo. El régimen era privilegiado. Por eso Fujimori le decía “la cédula de los vivos”, recordó el ex oficial mayor del Legislativo José Élice.
Un régimen pensionario privilegiado
Para el congresista del Frente Amplio (FA) Enrique Fernández Chacón, la ley de cédula viva fue una norma que favoreció al trabajador, pero únicamente a los que estuvieron en la administración pública. “Ellos no tenían liquidación, pero seguían ganando (al jubilarse) como si siguieran trabajando”, recordó.
En plena pandemia del coronavirus, el Congreso retomó el debate sobre la reforma del sistema de pensiones. Primero aprobaron el retiro de los aportes a las AFP y, segundo, la liberación de la ONP. Esta decisión ha generado una trifulca jurídica con el Ejecutivo, que terminaría de resolverse en el plenario del Tribunal Constitucional (TC). (Con información de La República)
Foto: Crónica Viva / Antonio Melgarejo