NACIONES UNIDAS.- El presidente de Francia, Emanuel Macron, llamó hoy en la ONU a no firmar acuerdos comerciales con los países que «no respeten el Acuerdo de París» sobre el cambio climático, al tiempo que abogó por una reforma del G-7 que incluya a África en la «prioridad» de la lucha contra las desigualdades.
«Debemos estar conformes con los compromisos que hemos tomado. No firmemos más acuerdos comerciales con los países que no respeten el Acuerdo de París», dijo Macron en su discurso ante la Asamblea de Naciones Unidas.
Asimismo, Macron propuso adecuar el G-7 a la nueva realidad para que «no seamos los países ricos» quienes digan en solitario cómo afrontar las desigualdades, por lo que abogó por incluir de alguna manera a África en estos debates.
Pero en primer término y desde su convencimiento de que los efectos del cambio climático recaen principalmente en los países más pobres, Macron hizo una encendida defensa del Acuerdo de París, del que el presidente de EE.UU., Donald Trump, se desmarcó, y pidió a los presentes en la Asamblea a no colaborar comercialmente con quien no respete esta lucha en favor del medio ambiente.
Preguntado posteriormente en rueda de prensa sobre si esa postura quiere decir que no firmará pactos con EE.UU., Macron dijo a los periodistas que está dispuesto a seguir trabajando con Washington en cuestiones comerciales puntuales, como las conversaciones en el plano industrial que están llevándose a cabo o a llegar a acuerdos sobre tarifas.
«Quiere decir que no habrá grandes acuerdos que sean posibles si no son conformes con el Acuerdo de París y nuestros propios objetivos», apuntó.
«Apoyo la idea de que no firmemos ningún acuerdo comercial con países que no cumplan con el Acuerdo de París», dijo Macron, que insistió en que Francia debe tener en cuenta los «problemas medioambientales»
Dentro de la Asamblea, Macron propuso crear un «mecanismo colectivo» para reducir las desigualdades junto a la ONU pero también con la OCDE porque, argumentó, «hay que cambiar de método, cambiar las reglas en terreno social y económico«, algo en lo que también debería participar una Organización Mundial del Comercio reformada.
Asimismo, Macron, en su «prioridad en la lucha contra las desigualdades», ha expresado su deseo de reformar el G-7 de cara a la reunión de septiembre en Biarritz «para asociarnos mejor y encontrar nuevas formulas de coordinación».
«No queremos que los países ricos definamos solos el modelo del mundo, eso es anticuado», aseveró Macron, quien no ve aceptable la desigualdad de oportunidades en función del país en el que una persona haya nacido.
Macron, que también quiere incorporar en el G-7 «un diálogo con los gigantes de internet«, ha dicho que «hemos de hacer un hueco necesario a África, una «alianza» que ayude a solucionar los «desafíos comunes»
El presidente de Francia se mostró una vez más favorable al multilateralismo, pues «la otra alternativa es la ley del más fuerte, seguir por nuestro lado, nos va a conducir directamente a replegarnos y al conflicto en un todos contra todos que afectará incluso a quien se considere más fuerte».
EFE/Foto: prensa-latina.cu