CARACAS.- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró hoy que su Gobierno derrotó un intento de golpe de Estado tras capturar a 92 paramilitares colombianos y a importantes dirigentes opositores que pretendían llevar a cabo una «emboscada violenta y fascista» este 1 de septiembre.
«Hoy hemos derrotado una intentona golpista que pretendía llenar de violencia, de muerte, a Venezuela y a Caracas (…) Los que amenazaron con asaltar Caracas para asaltar el poder en Miraflores terminaron en su estado Miranda», dijo Maduro.
El primer mandatario venezolano detalló que hace dos días capturaron a 92 paramilitares colombianos que tenían un campamento en la zona del Manicomio, al norte de Caracas y cercana al Palacio de Miraflores, y aseguró que la oposición venezolana tenía conocimiento de esto.
«Ellos ahora dicen que no iban a dar un golpe de Estado, ahí están los vídeos (…) Para que ustedes vean que amenazaron que iban a asaltar Caracas, que iban por mí para Miraflores, que el 1 de septiembre se acababa todo», señaló Maduro.
El Servicio Bolivariano de Inteligencia venezolano (SEBIN) ha aprehendido a varios dirigentes opositores en días previos a la movilización convocada por la oposición que hoy se llevó a cabo en la capital del país.
Maduro aseguró que estos «dirigentes de la derecha golpista» fueron detenidos por tener «planes para colocar bombas» y así «atacar a su propia gente».
También indicó que el presidente del Parlamento venezolano, Henry Ramos Allup, «sabía de todos estos planes» golpistas y que, por sus expresiones «fascistas de odio promotoras de la violencia», lo demandaría ante tribunales nacionales e internacionales.
Este 1 de septiembre se llevaron a cabo dos movilizaciones en la ciudad de Caracas, una convocada por la oposición venezolana para presionar al Poder Electoral a dar las fechas de la próxima etapa del referendo revocatorio al mandato de Nicolás Maduro, y otra del sector oficialista en apoyo al presidente venezolano.
El Gobierno ha denunciado supuestos planes golpistas relacionados con la marcha opositora, y en la última semana se han practicado varios allanamientos y detenciones que desde la oposición han tachado de «persecución política».