Más de 1,500 académicos que laboran en una veintena de entidades educativas y de investigación en México firmaron un desplegado en el que piden un «boicot académico contra el genocidio en Gaza» a través del rompimiento de relaciones y convenios de colaboración con instituciones de educación superior israelíes.
«A principios de este año y a lo largo de 400 días, advertimos a las autoridades universitarias y gubernamentales del país que el actual Gobierno de Israel ha efectuado un genocidio en la Franja de Gaza«, se lee al comienzo del desplegado.
«Lo anterior es hoy un hecho corroborado por expertos en derechos humanos, como la relatora especial de la ONU para los territorios palestinos ocupados, Francesca Albanese, así como por diversos juristas y por la abrumadora mayoría de los más destacados expertos en la materia a nivel mundial, algunos de ellos de herencia judía», continúa.
LA ACADEMIA NO ES NEUTRAL.
BOICOT ACADÉMICO CONTRA EL GENOCIDIO.
En este hilo, pronunciamiento de más de 1500 académicxs.
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Sin embargo, señalaron, altos funcionarios israelíes son prófugos de la justicia internacional, mientras que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha sido incapaz de salvaguardar la integridad del pueblo palestino.
Ante dicho contexto, los firmantes estiman que el llamado de justicia del pueblo palestino ha sacudido al sistema académico mundial, toda vez que las universidades israelíes participan de múltiples formas en la comisión de los crímenes contra el pueblo palestino.
«Las universidades israelíes no son espacios de producción de conocimiento al margen de la política genocida de su Gobierno: están subsumidas a ésta y participan activamente en ella», aseguran.
Por ello, los investigadores y profesores –que están adscritos a instituciones como la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Colegio de México (Colmex) y la Universidad Iberoamericana (Ibero), entre muchas más– consideran que el boicot académico, sumado al militar, comercial y cultural, «es una de las pocas vías que quedan para frenar a un Gobierno y a un Estado genocidas y para que se haga valer el derecho internacional».
En palabras de los firmantes, «ni las universidades ni ningún otro espacio educativo pueden y deben permanecer neutrales ante la injusticia».
Texto: WSV / Agencias
Foto: Milenio
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