A punto de trasladarse a Nueva Zelanda el diario británico, «The Times» ha publicado que el primogénito de Meghan y Harry, que sería el séptimo en la línea de sucesión al trono, contará con una vida de lo más normal liberándole así del titulo que le corresponde de príncipe o princesa gracias a la decisión de sus padres.
Pese a ver tomado esta decisión cabe la posibilidad de que la reina Isabel II decida intervenir y les convezca para que el niño siga la estela de Luis, Jorge y Carlota de Cambridge que si tienen título real.
Los duques por el momento van a seguir los pasos de la princesa Ana (hermana de la reina Isabel II), que también decidió que sus hijos, Zara y Peter Phillips, no llevaran ningún título real.
Por otro lado, si es niño será reconocido como conde de Dumbarton y si es niña como lady Mountbatten-Windsor, con el primer nombre insertado después del título de lady.
Al haber tomado la decisión de renunciar al titulo real tendrán libertad para elegir el primer nombre sin que la tradición real les dé muchos problemas.
Fuente: larazon.es