CAROLINA DEL NORTE.- Ante un mutitudinario mitin en Winston-Salem, la primera dama estadounidense, Michelle Obama, abrazó calurosamente a la candidata demócrata, Hillary Clinton, al darle su más amplio respaldo en las elecciones de noviembre.
«Ella está lista para ser comandante en jefe desde el primer día, y sí, sucede que es una mujer», dijo Michelle Obama en la primera presentación en conjunto ante más de once mil personas que las ovacionaron largamente.
Las dos primeras damas -la actual y la ex- se abrazaron calurosamente en la tarima de un mitin en el sureño estado de Carolina del Norte, pieza crucial del rompecabezas electoral del 8 de noviembre.
Más popular que su marido, Michelle Obama elogió luego a la exsecretaria de Estado, de quien valoró que tiene «más experiencia que cualquier candidato en nuestras vidas, más que Barack, más que Bill».
La Primera Dama dijo que los estadounidenses se enfrentan a dos opciones: un candidato «que nos pide que nos volquemos unos contra otros», construyamos muros y tengamos miedo», y Clinton, la «fuerza unificadora«.
Clinton, quien se presenta como la sucesora de Obama, indicó que en los comicios «está en juego todo el progreso logrado» por el Presidente demócrata y su «increíble Primera Dama».
El encuentro entre ambas mujeres era casi impensable hace ocho años: las primarias demócratas del 2008, que enfrentaron a Barack Obama y Hillary Clinton, habían sido amargas y tensas.
Pero las cicatrices se cerraron y las dos mujeres, ambas nativas de Chicago, vieron servido en bandeja de plata, por Donald Trump, un tema en común: la defensa de las mujeres, en el marco de las declaraciones misóginas y degradantes del republicano difundidas en un video del 2005.
«Sí, Hillary Clinton es mi amiga», señaló Obama, quien en las últimas semanas se ha convertido en una contundente voz contra el candidato republicano, Donald Trump, y a favor de la aspirante demócrata. (ECHA – Agencias)