El Ministerio de Educación (Minedu) condena la agresión a un menor de tercero de secundaria del colegio Almirante Miguel Grau de Chaclacayo en la que participaron diez estudiantes, quienes han sido suspendidos por una semana mientras se investigan los hechos y se interviene integralmente la institución educativa, informó Killa Miranda, titular de la Dirección Regional de Educación de Lima Metropolitana (DRELM).
La funcionaria explicó que, en concordancia con esta intervención integral, una comisión multidisciplinaria del Minedu evaluará en la institución educativa la situación disciplinaria, el aspecto académico y la situación de convivencia del colegio y verá si hay otros casos similares.
Indicó también que el Minedu está brindando asesoría legal a la madre del menor para que haga la denuncia correspondiente ante la Fiscalía de Lima con el fin de que esta actúe de inmediato ante este grave hecho, que causó la fractura de la mandíbula del estudiante, quien ha sido operado en el Hospital Guillermo Almenara.
“Por especial encargo del ministro de Educación, estamos siguiendo de cerca el caso junto a la familia del menor afectado”, señaló Miranda.
La directora de la DRELM hizo un llamado a los padres de familia, docentes, estudiantes y a los medios de comunicación para que se fomente la paz y no la violencia. “Este no es un tema de una escuela ni de un solo chico, es un tema que afecta a toda la comunidad y evidencia los altos índices de violencia de la sociedad”, comentó.
Anotó que no se puede permitir que la violencia de las calles ingrese a la escuela y que los niños y jóvenes se acostumbren a ver la violencia escolar como algo normal. “Hay que frenar esta situación pues como sociedad no podemos permitir la crueldad”, aseveró.
Miranda también cuestionó que los escolares involucrados en esta agresión hayan filmado este hecho y lo hayan difundido por Internet como si fuera algo normal. “Eso significa que no estamos haciendo algo bien como padres, que nos falta trabajar como maestros, implica muchas cosas que tienen que ver con nuestra humanidad”, reflexionó Miranda.
La agresión contra el menor ocurrió días después de que fuera el goleador en un partido de fútbol y luego de que se corriera el rumor de que él había hablado mal de su agresor. Días después del partido, los compañeros estuvieron amenazándolo con pegarle, según testimonios de su madre.