El ministro de Defensa, Walter Martos Ruiz, sostuvo que es muy penoso que, en lugar de estar luchando todos juntos en estos momentos para enfrentar la pandemia de la COVID-19, el Congreso esté actuando más “por impulsos del hígado que por una razonabilidad” en su labor legislativa.
El funcionario se refirió así a la modificación de cinco artículos de la Constitución, entre ellos el referido a la inmunidad parlamentaria, aprobados por el pleno del Parlamento el último domingo, “que debilitan la democracia del país”.
“Es muy penoso en este escenario difícil en el que debemos estar unidos todos los peruanos veamos que el Parlamento en este momento esté actuando más por impulsos del hígado que por una razonabilidad. Esto, indudablemente debilita la democracia del país”, recalcó.
En RPP, Martos manifestó que el Congreso tuvo la oportunidad de ganarse la confianza del pueblo, que la había perdido, y de hacerse respetar como tal.
Es necesario, aseveró, trabajar en unidad en esta situación de pandemia para salir con éxito de la situación y que cada día haya mejores resultados y se registren menos muertos.
“Es una situación crítica en la que el Ejecutivo tiene que concentrarse en la solución de los problemas en forma inmediata porque está falleciendo mucha gente”, afirmó el titular de Defensa, tras detallar el viaje realizado hoy junto al presidente Martín Vizcarra al norte del país para ver el tema de la COVID-19.
El ministro Martos alertó que de llegarse aprobar la reforma constitucional lo único que se está creando es una inestabilidad política, económica y social.
“No se trata del presidente Martín Vizcarra, ni de los ministros de Estado actuales, sino de los mandatarios que vendrán en el futuro y de todo el Ejecutivo”, refirió.
Los presidentes y los ministros, dijo, todos los días estarán en los juzgados defendiéndose de los juicios y dejando de cumplir su función porque -sostuvo- el Ejecutivo es el que toma decisiones para concretar las políticas que requiere el país y mucha gente se ve afectada por estas determinaciones.
De acuerdo con los cambios introducidos, ahora el jefe del Estado podrá también ser acusado por delitos contra la administración pública cometidos durante su mandato o con anterioridad.
Los ministros de Estado no contarán con antejuicio político ni ningún tipo de inmunidad durante ejercicio del cargo. (Andina)