La Misión de Observación Electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA) felicitó al pueblo peruano y a las autoridades del sistema electoral por su participación en la segunda vuelta presidencial, realizada ayer.
El jefe de esta delegación, Rubén Ramírez, reconoció también los llamados a la tranquilidad hechos por los dos candidatos participantes y consideró que esa actitud debe continuar, “y que las eventuales inconformidades se diriman por las vías legales a su alcance”.
En ese sentido, hizo un pedido, tanto a los participantes en los comicios como a la ciudadanía para que “aguarden con paciencia los resultados oficiales que darán a conocer las autoridades”.
“Su conducta en estas horas cruciales será determinante para mantener un clima de tranquilidad y paz social en el país”, manifestó Ramírez.
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Respecto a la logística y el desarrollo de los comicios, indicó que debe reconocerse el esfuerzo de las autoridades peruanas “por la organización de un proceso de gran complejidad, marcado por la pandemia y la polarización política”.
A lo largo del mismo, se garantizó el ejercicio del derecho al voto, de manera secreta y personal, dijo Ramírez, quien también señaló que la misión de observadores a su cargo tomó conocimiento de denuncias sobre “casos aislados” de irregularidades, entre ellos el hallazgo de cédulas marcadas. Esto fue objeto de una “intervención inmediata de las autoridades”, añadió.
El diplomático precisó que la Misión de Observadores de la OEA estuvo presente en 18 regiones del país y en cinco ciudades del exterior. Ello permitió tener acceso a 191 recintos y 861 mesas de votación, indicó.
Tras la labor desempeñada en el proceso, la delegación prepara su informe final, que será puesto a consideración de la OEA en los próximos días, dijo Ramírez.
ANDINA