La agencia crediticia Moody’s ha rebajado por vez primera el rating crediticio de Israel de A1 a A2 con perspectiva «negativa» debido a la inestabilidad generada por la guerra contra Hamás y los temores a una expansión a gran escala contra las milicias de Hezbolá en Líbano.
La evaluación, esgrime la agencia en un comunicado recogido por el Times of Israel ha cambiado debido al «conflicto militar en curso con Hamás y sus amplias consecuencias, que elevan materialmente el riesgo político para israel y debilitan al Ejecutivo, a las instituciones legislativas y a su fortaleza fiscal a un futuro a corto plazo».
La perspectiva negativa, añade Moody’s, se debe al «riesgo de una escalada» con las milicias de Hezbolá en la frontera norte del país, escenario de constantes cruces de artillería prácticamente desde el comienzo de la guerra entre Israel y Hamás el 7 de octubre.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha salido inmediatamente al paso de esta evaluación con un comunicado en el que ha asegurado que la economía israelí — que dirige el ministro de Finanzas Bezalel Smotrich, uno de los grandes abanderados ultranacionalistas del Ejecutivo — no tiene nada que ver en esta valoración, que ha atribuido más bien al caos desatado por el conflicto con Hamás.
«La economía de Israel es fuerte. La rebaja en el rating no está conectada a la economía, sino que se debe por completo al hecho de que estamos en guerra. Cuando ganemos la guerra el rating volverá a subir. Y la vamos a ganar», ha asegurado.
Esta rebaja es la primera desde que la agencia crediticia comenzara a evaluar a Israel en 1998 y podría traducirse en un incremento de los tipos de interés o en la debilitación de la moneda nacional, el shekel.
Europa Press