MADRID (España).- Varios relatores de Naciones Unidas han condenado la «masacre» perpetrada la semana pasada por las fuerzas israelíes durante el reparto de alimentos en la Franja de Gaza y han pedido a Israel poner fin a su «campaña de hambruna» en el enclave palestino, donde han muerto ya más de 30.600 personas.
«Israel ha estado matando de hambre intencionadamente al pueblo palestino en Gaza desde el pasado 8 de octubre. Ahora tiene como objetivo a los civiles que buscan ayuda humanitaria procedentes de convoyes», han aseverado los expertos de la ONU, que han alertado de que 112 personas murieron durante la citada matanza cuando trataban de hacerse con harina.
Así, ha instado a las autoridades israelíes a poner fin cuanto antes de esta «campaña» y «dejar de tener a los civiles como objetivos» de sus ataques, al tiempo que ha recordado que las tropas israelíes «dispararon contra una multitud reunida en el suroeste del enclave para hacerse con alimentos.
«El ataque tuvo lugar después de que Israel negara la entrada de ayuda humanitaria a la ciudad de Gaza y el norte del enclave durante más de un mes», han sostenido en un comunicado en el que han afirmado que la masacre del 29 de febrero sigue un «patrón» de ataques contra civiles.
«Israel ha abierto fuego también contra convoyes humanitarios en varias ocasiones y a pesar de que se han compartido las coordenadas de estos camiones», han advertido antes de recordar que en enero, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) reconoció que era «plausible» que Israel estuviera cometiendo un genocidio genocidio y ordenó la entrega de alimentos de forma urgente.
Sin embargo, desde que se emitió el fallo solo han entrado en la Franja de Gaza 57 camiones entre el 9 y el 21 de febrero. «No está respetando las obligaciones en el marco del Derecho Internacional y no está cumpliendo con las medidas establecidas por la corte», recoge el texto.
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Situación sin precedentes
En este sentido, han acusado al país de «negar sistemáticamente la entrega de ayuda humanitaria y de interceptar las entregas en los pasos fronterizos, mientras bombardea convoyes y dispara a civiles que buscan ayuda». «Lo hemos dicho antes y lo volvemos a decir: estamos alarmados al ver una población entera sufrir una hambruna sin precedentes, de forma rápida y completa», han aclarado.
Por otra parte, han expresado el «horror» de ver a «niños muriendo de inanición, deshidratación y hambre», y han reiterado la importancia de que la ayuda humanitaria «no sea utilizada como moneda de cambio en el proceso de negociaciones».
«Reiteramos nuestro llamamiento para que se introduzcan procedimientos especiales en el seno de la ONU, como la imposición de sanciones o el embargo de armas como deber de todos los Estados de garantizar que se respetan los Derechos Humanos y se pone fin a la violación del Derecho Internacional por parte de Israel», han zanjado.