Ollanta Humala rechazó hoy lunes las acusaciones que pesan en su contra por el Caso Madre Mía, y las atribuyó a un «linchamiento político».
«Yo no he cometido violaciones de derechos humanos. Las denuncias sobre derechos humanos comienzan cuando me inicié en la política», aseguró.
En declaraciones a la prensa extranjera, Ollanta Humala advirtió una «consigna» de sus contrarios políticos destinada a inhabilitarlo recurriendo a denuncias de cuando fue jefe de la Base Contrasubversiva de Madre Mía, en la región San Martín.
La fiscalía decidió la semana pasada abrir una investigación de oficio, a quienes resulten responsables, por el presunto delito de lesa humanidad luego de la difusión de los testimonios de dos nuevos testigos en el Caso Madre Mía.
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Ollanta Humala mencionó que las denuncias sobre los aportes a su campaña de parte de la empresa brasileña Odebrecht forman también parte de ese «linchamiento».
El exCEO de la constructora brasileña, Marcelo Odebrecht, aseguró ante las autoridades de Brasil y fiscales peruanos, que entregó –con dinero supuestamente ilegal– 3 millones de dólares para la campaña presidencial de Ollanta Humala en 2011.
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