GINEBRA (Suiza).- Las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC) que rigen el intercambio de productos agropecuarios y de alimentos deben actualizarse, señaló hoy Ngozi Okonjo-Iweala, (foto), directora general de esta institución internacional.
Como parte de un encuentro con especialistas en la sede de la OMC, Okonjo-Iweala reconoció que, a pesar de algunos avances positivos en estas áreas, con demasiada frecuencia dichos mercados continúan funcionando mal.
Cada vez está más claro que nuestras normas no siguen el ritmo de los desafíos a los que nos enfrentamos en la actualidad, ni de la evolución de los mercados mundiales, acentuó la directiva.
Asimismo, Okonjo-Iweala resaltó la importancia del comercio agrícola para lograr objetivos comunes que van desde acabar con el hambre hasta apoyar la agricultura sostenible.
La máxima representante de la OMC destacó, además, que durante el último cuarto de siglo al mundo le surgieron otros grandes desafíos como el cambio climático y el rápido crecimiento de la población, contribuyendo ambos a las preocupaciones en torno a la seguridad alimentaria.
De igual forma, apuntó que las distorsiones comerciales y los altos niveles de protección continúan siendo un problema importante en estas áreas, así como la falta de inversión en investigación, infraestructura y otros bienes que inciden en una productividad agrícola baja y estancada en muchas regiones.
Los miembros de la OMC están involucrados en negociaciones sobre el comercio agrícola desde hace más de dos décadas, cuando iniciaron dichas conversaciones a principios del año 2000 bajo el mandato original del Acuerdo sobre Agricultura de la entidad, recordó la directiva.
Dicho acuerdo, en vigor desde 1995, representó un importante paso adelante en los esfuerzos de los asociados por trabajar en función de un sistema de comercio agrícola justo y orientado al mercado, acotó la directora general Okonjo-Iweala.
Fuente y foto Prensa Latina