GINEBRA/Suiza.- El gobierno de Estados Unidos debe cesar de inmediato su política de separar a las familias de inmigrantes ilegales que llegan desde la frontera con México, señaló este martes la Oficina de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra.
La ONU estima que desde octubre han sido separados de sus padres varios centenares de niños. Sus progenitores son tanto migrantes como solicitantes de asilo.
La separación de las familias es una intromisión ilegal en la vida familiar, dijo la portavoz de la ONU en Ginebra, Ravina Shamdasani, al indicar que Estados Unidos es el único país del mundo que no ha ratificado la Convención de los Derechos del Niño.
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«Los niños jamás deberían ser encerrados, independientemente del estatus migratorio que tengan o el de sus padres», añadió Shamdasani.
«Preocupa muchísimo que en Estados Unidos el control migratorio parezca estar siendo priorizado por encima del cuidado efectivo y la protección de los niños migrantes», subrayó.
La mayoría de los migrantes que llegan a la frontera sur de Estados Unidos proceden de Honduras, Guatemala y El Salvador, donde muchos han tenido que huir de la violencia y violaciones a los derechos humanos, recordó la portavoz. (ECHA – Agencias)