MANAGUA.- El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, utiliza, en una entrevista con Efe, como referencia la situación de Cataluña para defender su negativa a permitir la entrada de observadores internacionales al país centroamericano, tras los incidentes de los últimos meses.
«¿Hay alguna iniciativa que diga que manden a Europa, que manden a Cataluña, a ver qué es lo que está pasando ahí, a observadores internacionales? Porque los catalanes tienen su punto de vista y yo los escucho», explica.
Ortega dice que en Cataluña «hubo unas elecciones y luego hubo una persecución, un encarcelamiento» y señala que «hay catalanes presos todavía allí en Madrid», pero «ningún organismo de derechos humanos en Europa o en Naciones Unidas (está) preocupado por lo que está pasando en Cataluña», asegura.
El presidente sandinista añade que «a nadie se le ocurre decir que vaya una misión, porque se supone que ese es un país que ya alcanzó su mayoría de edad, su madurez y entonces se le respeta y no se le agrede, en cambio a nosotros sí. Continuamente nos quieren estar supervisando, interviniendo».
Algunos informes de organizaciones de derechos humanos señalan que en Nicaragua se han registrado 400 muertos durante las protestas contra el mandatario que comenzaron el pasado 18 abril, cifra que las autoridades sitúan en 195.
Cataluña celebró el 1 de octubre de 2017 un referendo independentista, declarado ilegal por la justicia española, en el que se registraron incidentes y heridos, y el 21 de diciembre de ese mismo año hubo elecciones para escoger un gobierno autonómico.
Para Ortega, «en estos países, si cae preso un político de oposición, inmediatamente se convierte en un caso donde intervienen los europeos y los Estados Unidos».
«Ya no hace falta que se dé la tragedia de la muerte, sino que es un preso político y eso revuelve, y viene la campaña en favor de los presos políticos. Veamos la campaña que hay a favor de los presos políticos en el caso de Venezuela, que hay una campaña bien fuerte. Es un tratamiento diferente», explica el mandatario.
Asimismo, se refiere a la crisis por la migración que se vive en Europa, para sostener su negativa.
«¿A quién se le ocurre, frente al problema de la migración que vive Europa, provocada por los Estados Unidos y algunos países europeos, que fueron los que destruyeron la seguridad que había allá en la zona del Magreb», relata.
Ortega recuerda que «ellos la destruyeron, la seguridad no la destruyó Bachar Al Asad, ni la destruyó Gadafi, la destruyeron los europeos que hicieron causa común con los Estados Unidos para destruir una zona que era tan segura y que ahí mismo se detenía la migración que venía del sur de África, porque allí encontraban trabajo».
Según el líder sandinista, «había actividad económica, había crecimiento, había respeto a los derechos de las mujeres, increíble en países con una cultura de discriminación a la mujer. Entonces, a quien se le ocurre mandar una misión ahí».
Sin embargo, pese a la crítica a Europa, Ortega explica en la entrevista que sus relaciones con España son «normales, estables y respetuosas» con los diferentes gobiernos.
«Yo espero que cuando el gobierno de Pedro Sánchez pide respeto a los derechos humanos al gobierno de Nicaragua, lo está pidiendo para todos los nicaragüenses y no que se respeten los derechos humanos de unos, sino que se respeten los derechos humanos de todos«, dice el presidente.
Asegura que la posición de Nicaragua «ha sido no solo mantener, sino fortalecer las relaciones con todos los países, incluso con Estados Unidos» y agrega que su posición respecto a España, ha sido hacer «más fuertes y profundas» las relaciones bilaterales «dentro de un marco de respeto, y esa es la posición que tenemos».
EFE