Pakistán: Gobierno legaliza partido islamista tras llegar a un acuerdo

shadow

 

ISLAMABAD.- El Gobierno de Pakistán anunció este domingo que el partido islamista Tehreek-e-Labbaik Pakistan (TLP) vuelve a ser una organización legal en el país, una semana después de que se firmase un acuerdo entre ambas partes para poner fin a la marcha contra el embajador francés.

Las autoridades paquistaníes ilegalizaron el TLP bajo la Ley Antiterrorista de 1997, el pasado 15 de abril, después de sus simpatizantes protagonizaran tres días de protestas violentas en todo el país por el arresto de su líder, en unos disturbios que causaron al menos cuatro muertos y centenares heridos.

«El Gobierno federal se complace a eliminar el nombre de Tehreek-e-Labbaik Pakistán de la lista» de organizaciones terroristas, emitió el Ministerio del Interior paquistaní en una notificación.

Un funcionario de la oficina del primer ministro, que pidió el anonimato, agregó a Efe que el mandatario paquistaní, Imran Khan, permitió ayer la presentación de una orden para revocar el estatus proscrito de TLP, una decisión que finalmente se efectuó hoy.

Esta decisión se produce una semana después de que ambas partes firmasen un acuerdo para poner fin a la marcha organizada por el TLP contra el embajador de Francia.

Como parte del acuerdo, las autoridades liberaron en cuatro días a más de 1.000 seguidores del TLP, mientras se espera que otros 1.000 activistas sean liberados en los próximos días.

Por su parte, el TLP concluyó que cancelará su protesta una vez se implemente este acuerdo que, según apuntaron varios medios locales, incluiría la puesta en libertad del líder del partido islamista, Saad Rizvi.

Miles de simpatizantes iniciaron el pasado 22 de octubre una marcha desde la ciudad de Lahore, su principal bastión, hasta la capital paquistaní para presionar a las autoridades del país para que expulse al embajador de Francia en Pakistán.

Estas protestas causaron al menos nueve muertos y un centenar de heridos y su origen se remonta a noviembre del año pasado, cuando miles de personas salieron a protestar contra el presidente francés y su respaldo a las caricaturas del profeta Mahoma tras la decapitación de un profesor que las mostró a sus alumnos, unos comentarios que en ciertos sectores del mundo islámico se consideraron «blasfemos».

El Gobierno de Pakistán aceptó las demandas de expulsar al embajador francés del país y cortar las relaciones bilaterales, pero ha incumplido desde entonces su promesa, según los islamistas.

No obstante, el ministro de Interior de Pakistán, Sheikh Rasheed Ahmad, afirmó en una rueda de prensa el pasado 21 de octubre que Pakistán no puede permitirse expulsar al embajador francés porque esto dañaría sus relaciones con la Unión Europea. EFE

 

789834