CIUDAD DEL VATICANO.- «Por favor nada de puertas blindadas en la Iglesia, nada, todo abierto», pidió el papa Francisco este miércoles en la audiencia en la Plaza de San Pedro, luego de los ataques terroristas en París y las amenazas del Estado Islámico a la capital italiana.
«Hay lugares en el mundo donde no se cierran las puertas con llave, aún los hay, pero hay tantas donde las puertas blindadas se vuelven normales, no tenemos que rendirnos a la idea que tenemos que aplicar este sistema, que es también de seguridad, a toda nuestra vida, de la familia, de la sociedad y tanto menos de la Iglesia”, agregó.
Las medidas de seguridad se intensificaron en la plaza San Pedro ante las amenazas del Estado Islámico. Fotos: Agencia Efe
“Sería terrible una Iglesia no hospitalaria, así como una familia replegada sobre sí misma vuelve árido el mundo y se mortifica a sí misma, por favor nada de puertas blindadas en la Iglesia, nada, todo abierto«, enfatizó.
“La Iglesia es la portera de la casa del Señor, la portera, no es la dueña de la casa del Señor”, agregó.
Según Francisco, el tema del “paso de las fronteras” se ha vuelto “crucial” y “la puerta ciertamente debe custodiar, pero no rechazar, no debe ser forzada, al contrario se pide permiso porque la libertad se oscurece con la prepotencia de la invasión”.
Hasta las monjas fueron sometidas al chequeo policial
El Papa se centró en los temores desencadenados por los recientes atentados que deben haber detenido también a algunos fieles, ya que en la plaza, en ocasión de la primera audiencia general tras la matanza en la capital francesa, no parecía haber las 15 mil personas que habían pedido el pase para ingresar, informó la agencia Efe.
Sin embargo, los comentaristas señalan que no se sabe si Francisco pensaba en el riesgo del terrorismo al manifestarse de esa manera o si reflexionaba sobre el tema de la apertura de la Iglesia.
Momentos antes el secretario de Estado, Pietro Parolin, había anunciado que si bien «el Vaticano puede ser blanco debido a su significado religioso», desde la Santa Sede se confirma que «nada cambiará» en la agenda del papa Francisco.
«Podemos elevar el nivel de las medidas de seguridad en los alrededores del Vaticano. Pero no vamos a paralizarnos por miedo. No vamos a modificar la agenda papal«, aseguró el número dos Vaticano.
“Con esta reflexión hemos llegado al umbral del Jubileo. Está cerca. Esta frente a nuestras puertas, no solamente ante la Puerta Santa, sino ante la Puerta de la Misericordia de Dios que es una bella puerta que acoge el arrepentimiento y ofrece la gracia del perdón. Se llama Jesús. El es la puerta que nos deja entrar y salir”, señaló.
“Abramos nuestras puertas y salgamos para ir al encuentro de los otros: algunos están frente a nuestras puertas y quizá no tienen el coraje y la fuerza de tocar”, acotó.
Al término de la audiencia pidió a la comunidad internacional vigilar “atentamente” sobre las condiciones de vida de los menores, especialmente en los lugares en los que están expuestos al reclutamiento por parte de grupos armados, así como ayudar a las familias a garantizar a cada niño y niña el derecho a la escuela y a la educación. (ECHA- Agencias)