Algunas veces es difícil reconocer el Parkinson. Esta enfermedad se caracteriza por la falta de producción de una sustancia química en el cerebro llamada dopamina, la cual es responsable de ayudar a los movimientos del cuerpo y de regular el estado de ánimo de una persona.
Si en algún momento sufre un ligero temblor o una rigidez en el brazo, fácilmente lo podría confundir con un tic nervioso o un calambre, pero si este problema es continuo, usted sería víctima del Parkinson, una enfermedad degenerativa que le puede ocurrir a cualquiera.
“Este problema, es una enfermedad neurodegenerativa, que se origina por la disminución en la producción del neurotransmisor Dopamina a nivel de una estructura del tronco cerebral”, manifestó el Dr. Javier Huamaní, neurólogo de Solidaridad Salud de La Victoria.
De acuerdo al especialista, el pronóstico mejora considerablemente sí es detectado en estadios iniciales. Existen dos tipos de enfermedad de Parkinson: el tremulante, de diagnóstico relativamente fácil; y el rígido-acinético, de diagnóstico difícil, debido a la ausencia inicial de temblor.
“Lamentablemente, este segundo grupo de pacientes que sólo presenta rigidez, puede presentarse como dolores lumbares, cervicales y articulares y no visitan a un neurólogo; más bien se encuentran en manos de traumatología, reumatología, rehabilitación o medicina interna” indicó Huamaní. (E.C.M.)