CASABLANCA/Marruecos.- La cocina peruana celebra su cuarto Festival Gastronómico en Marruecos este año centrado en la «capital económica» del país, Casablanca, tras tres ediciones anteriores en Rabat.
El festival, que solo durará dos días, se inauguró anoche con un menú de degustación preparado por el chef peruano Mario Céspedes, venido desde Madrid, donde regenta dos restaurantes, además de otro en Avilés (norte de España) donde comenzó su carrera como cocinero.
Mario Céspedes (foto), ofreció un menú compuesto por los clásicos de la cocina peruana: ceviche de caballa, tiradito de corvina con ají amarillo, pulpo con guiso de olluco (un tubérculo de la familia de la papa), gyosa (empanadilla japonesa) de anticuchos o pastel de papa rellena de carne.
Céspedes, que fue muy aclamado por los comensales -diplomáticos, periodistas y restauradores en esta primera jornada-, señaló que trató de hacer un menú lo más variado posible mezclando la excelente materia prima local con las salsas y condimentos que trajo desde España por ser difíciles de encontrar en Marruecos.
Como parte de la «diplomacia gastronómica» que Perú viene practicando desde hace años, este Festival Gastronómico peruano es una iniciativa de la Embajada de Perú en Rabat y la Oficina Comercial del país abierta en Casablanca para tratar de explorar oportunidades de negocio en Marruecos.
Desde su creación en el 2015, el festival invita a Marruecos a algún chef afincado en España (donde existen 250 restaurantes peruanos) que, en colaboración con un cocinero local, da a conocer al público marroquí durante varios días la afamada gastronomía del país andino.
Tras tres ediciones anteriores en Rabat, sus promotores consideraron que la cocina peruana ya se había posicionado en Rabat -donde conceptos como el ceviche o el anticucho ya no son una rareza- y tocaba «dar el salto» a Casablanca, una ciudad con mayor oferta culinaria, y con mayor presencia de una clase de negocios que gasta en ocio y restauración.
EFE/Foto: profesionalhoreca.com