Perú no encaja en las eliminatorias con un fútbol tan siniestro y pobreza en todas sus costuras para que se encuentre tan expuesto a quedarse sin el Mundial del 2026.
En la derrota ante Argentina no se vio el resurgimiento y el cambio de aceite que necesitaba el equipo para quedar aplastado en la tabla con posibilidades tan recortadas de merecer la gloria de la clasificación.
Ahora lo que viene es tan sombrío. Ganar a Bolivia en La Paz y a Venezuela en Lima es la tarea que vendrá en la fecha doble de noviembre.
Cierto que el comienzo de la eliminatoria para Catar 2022 fue un calco, pero con lo que apreciamos con la selección de Reynoso, estamos cada vez más lejos de instalarnos en el Mundial de Norteamérica,
Con Reynoso no hay certezas de mejoría y la sombría esperanza de escalar se ha hecho alejada porque el tema del gol tiene un enorme faltante. De ese modo no se llega a ningún lado. (Hugo Laredo).