Más de 5.000 familias de refugiados y migrantes vulnerables, en su mayoría de Venezuela, recibirán canastas de alimentos durante la cuarentena dictada en Perú para enfrentar el contagio del COVID-19, según informaron las agencias de Naciones Unidas en Lima.
La situación de los migrantes venezolanos en el Perú, que se acercan al millón de personas, es una de las preocupaciones de las organizaciones internacionales debido a que la inmovilización a nivel nacional, hasta el 26 de abril, les impide proveerse de ingresos y asegurar su manutención.
«Esta es una crisis que llama a la solidaridad. Agradecemos el trabajo de todas las personas e instituciones y empresas privadas que están respondiendo a este llamado», declaró el Coordinador Residente del Sistema de Naciones Unidas en el Perú, Igor Garafulic, sobre las donaciones que han permitido preparar las canastas con alimentos.
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) entregarán las ayudas para llegar a las personas con vulnerabilidades extremas en Lima, según detalló un comunicado.
«Emprendimos el reto de asistir a 5.000 familias de migrantes y refugiados venezolanos en situación de extrema vulnerabilidad, con el empeño de remediar en algo la difícil situación por la que atraviesan», afirmó por su parte el jefe de Misión de la OIM en Perú, Jorge Baca.
«Recordemos que más de 80 % de la población venezolana en el Perú se desarrolla en el sector informal y su economía se basa en el ingreso diario que pueda obtener y luego de 25 días de aislamiento social obligatorio se encuentra muy necesitada de asistencia alimenticia urgente», agregó Baca.
En opinión del representante de Acnur, Federico Agusti, «para que las personas refugiadas y migrantes puedan sumarse y proteger al Perú, tenemos que ayudarles también a quedarse en casa. Por eso el apoyo en alimentación es primordial. Muchos llevan días sin comer».
«Estas canastas son una medida complementaria, en respuesta a la atenta llamada del gobierno, y son destinadas a una población extremadamente vulnerable que no será beneficiada por el bono del gobierno peruano», agregó Agusti, en alusión al bono de 380 soles (108 dólares) entregado por el Ejecutivo a 3,5 millones de hogares pobres.
Las organizaciones de base Illari Amanecer y Unión Venezolana fueron los aliados de las agencias de Naciones Unidas para localizar y contactar a las familias más vulnerables y hacer la entrega de la asistencia durante estos días de movilización restringida.
El gobierno del presidente Martín Vizcarra extendió la cuarentena y toque de queda en Perú hasta el 26 de abril próximo para reducir la velocidad de los contagios de la pandemia en el territorio peruano, que ha sumado 4.342 casos y 122 fallecidos.
EFE/ Fotos EFE