Un grupo de colectivos LGTBI realizaron un plantón frente a la sede de la Dinincri, en la avenida España, exigiendo una ardua investigación para que se encuentre a los responsables de la muerte de dos trabajadoras sexuales transgénero que habrían sido víctimas de las mafias de la prostitución.
«Las muertes de Rubi Ferrer y Priscila Aguado no pueden quedar en la impunidad, por eso estamos exigiendo la policía que atienda la denuncia que fue derivada a Carabayllo y retorne a Lima, lugar donde ellas trabajaban», indicó la vocera del colectivo LGTBI.
«Sabemos que en el Perú en estos últimos tiempos existen mafias organizadas de proxenetismo extranjero que quieren ocupar todas las plazas de la ciudad y no solo del centro de Lima», expresó en diálogo directo con TVPerú.
«Es muy lamentable que se reprima a las trabajadoras sexuales, en vez de buscar otra solución, como la captura de estos delincuentes proxenetas que buscan la confrontación por apropiarse de las zonas rojas en la ciudad», agregó.
La muerte de estas dos personas debe de llamar a la reflexión, no sólo de la comunidad LGTBI, sino también de toda la sociedad y de las autoridades, porque estamos desamparadas y desatendidas, sobre todo cuando venimos a presentar una denuncia ante la policía, expresó.
«Nuestras vidas valen lo mismo que la de cualquier ciudadano, por esa razón estamos aquí para exigir justicia, justicia que a veces tarda, pero que tiene que llegar», finalizó.