Un bebé y su padre presuntamente secuestrados fueron encontrados sanos y salvos en Huánuco, pero el caso dio un gran giro. El padre fingió el rapto para obtener dinero, según informó la Policía Nacional del Perú.
Evelyn Martínez pudo tener entre sus brazos a su bebé de un mes de nacido, quien había desaparecido desde el último jueves, junto a Marco Antonio Sánchez Juárez, de 35 años, por el mercado La Arenera, en Huaycán.
Desde ese momento, la madre del menor de edad no supo nada, pero la preocupación se convirtió en angustia cuando recibió amenazas a través del WhatsApp en donde le exigían 40,000 soles para no atentar contra la vida del bebé y del padre. Evelyn Martínez puso la denuncia en la comisaría de Huaycán.
Para la PNP el caso tenía algunas inconsistencia porque tras revisar las cámaras de seguridad se ve al padre subir a una mototaxi al lado de una mujer, que no era la madre, y dirigirse rumbo a la Carretera Central.
El último sábado, agentes de la División de Investigación de Secuestros de la Dirincri encontraron al padre del pequeño y al bebé en el baño de un centro de salud de Huánuco.
Agentes de la Dirincri viajaron junto a la madre a Huánuco y, por fin, pudo tener en sus brazos al bebé.
«Solo pido justicia. Quiero que se capture a todos los que han estado implicados en el secuestro de mi bebé. El padre que esté preso», dijo Evelyn Martínez en medio de las lágrimas al llegar a Lima.
Texto: WSV
Foto: Composición
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