LONDRES.- La Policía de West Yorkshire (norte de Inglaterra) reveló hoy que investiga posibles «vínculos con la extrema derecha» del autor del asesinato de la diputada laborista Jo Cox.
En una declaración, la Policía comunicó que trabaja con la Unidad Antiterrorista del Noreste del país sobre el asesinato ayer a tiros de la parlamentaria británica, presuntamente perpetrado por un hombre de 52 años, Tommy Mair, cuya familia también ha informado que tenía antecedentes por problemas mentales.
«Tenemos constancia de la especulación que hay en los medios de comunicación con relación al vínculo del sospechoso con los servicios de salud mental y ésta es una clara línea de investigación que estamos siguiendo», dijo la jefa de Policía, Dee Collins, que agregó que barajan además la supuesta relación del asesino con «la extrema derecha».
Esta última hipótesis, de la que también se hacen eco los medios, es «una línea de investigación prioritaria» que ayudará a «establecer el motivo tras el ataque a Jo», según Collins.
Los agentes están tratando, además, de esclarecer cómo el hombre «pudo llegar a tener posesión de un arma de fuego ilegal».
Según este último parte policial, en el momento en que Cox fue agredida, «un hombre de 77 años intervino valientemente para ayudar» a la diputada y, al hacerlo, «sufrió una grave herida en el abdomen» por la que permanece ingresado en el hospital, donde se encuentra «estable».
El cuerpo policial de West Yorkshire dijo que los agentes continuarán interrogando a Tommy Mair, después de que los exámenes médicos concluyeran que el presunto autor de la muerte de Cox es «apto» tanto para ser detenido como interrogado.
Durante la investigación, ha salido a la luz que la diputada recibió en dos ocasiones «comunicaciones maliciosas de naturaleza sexual en su oficina parlamentaria en Westminster«, que están siendo investigadas por la Policía Metropolitana de Londres y por los que se llamó la atención a una persona, que no es Mair.
Según testigos presenciales, Tommy Mair gritó «el Reino Unido va primero» durante el fatal ataque contra la política.
Vecinos y familiares del presunto asesino comentaron hoy a varios medios locales que Mair había ayudado en el pasado a aprender el idioma inglés a personas asiáticas en este país y que nunca había hablado de temas políticos o raciales.
El hermano de Mair, Scott, de 50 años, detalló que su hermano contaba con un «historial de enfermedad mental», si bien «había recibido ayuda».
También el hermanastro del sospechoso, Duane St Louis, dijo que Mair nunca había expresado en el pasado opiniones sobre el Reino Unido, política o tendencias raciales.
EFE/Foto: pressandjournal.co.uk