Polonia pide respeto a Macron y le recomienda que se ocupe de su propio país

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VARSOVIA/Polonia.- La primera ministra polaca, Beata Szydlo, le pidió hoy al presidente de Francia, Emmanuel Macron, que respete a Polonia y se ocupe de su propio país, después de que el líder galo haya acusado al gobierno polaco de ir contra los intereses europeos y de dañar los valores de la Unión Europea.

«Le quiero recomendar al presidente de Francia que se ocupe de su propio país, y también le pido que tenga en cuenta que el futuro de la Unión Europea no sólo lo va a decidir Francia», afirmó Szydlo, quien también recordó al líder francés que «Polonia es un socio europeo con los mismos derechos que Francia».

Por su parte, el ministro polaco de Exteriores, Witold Waszczykowski, también arremetió contra Macron, a quien acusó de no saber nada sobre la realidad de Polonia.

Waszczykowski fue más allá y afirmó que «la economía francesa no es en este momento capaz de competir con las economías vibrantes de varios países europeos, incluida Polonia».

«Esto se debe a que los trabajadores franceses tienen beneficios sociales gigantescos», añadió.

Para el jefe de la diplomacia polaca, la insistencia de Macron en promover la reforma de la directiva de trabajadores desplazados se debe a la falta de competitividad de la economía francesa, lo que hace que París busque limitar las posibilidades de otras economías y, por consiguiente, quiera poner límites al mercado único.

«Europa ha sido creada como un espacio de valores y Polonia los está violando», había denunciado Macron en una rueda de prensa en la capital de Bulgaria.

Macron recordó que la Comisión Europea ha abierto un procedimiento de infracción a Polonia por su reforma del sistema judicial.

El Presidente francés se refirió a la posibilidad de que Polonia se oponga a la reforma de la directiva de trabajadores desplazados que él está impulsando y afirmó que los polacos se merecen más y que sus autoridades no podrán convencerles de que es mejor recibir salarios más bajos.

La actual norma sobre trabajadores desplazados permite que las empresas paguen a esos trabajadores, mayoritariamente de países del este, un salario que no sea superior al sueldo mínimo del Estado de acogida, lo que genera diferencias salariales con los trabajadores locales.

Macron asegura que la actual directiva es «una traición al espíritu europeo» y ya ha recibido el respaldo para su modificación de Austria y la disponibilidad de negociar cambios de Eslovaquia, la República Checa, Rumania y Bulgaria.

La primera ministra polaca reiteró ayer la oposición de Polonia a la reforma de la directiva.

EFE/Foto: versionfinal.com.ve

 

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