El Manchester United volvió a las andadas, a la cruda realidad en la que está inmerso esta temporada, y cayó derrotado de nuevo en la Premier League, ante el Brighton (3-1). Los visitantes se mostraron como un rival duro, con las ideas más claras y sin tanta presión. Con poco, dañaron claramente al cuadro del DT Ruben Amorín, incapaz de reflotar al gigante de Old Trafford en el día en el que los ‘red devils’ despedían a la leyenda Denis Law.
Le bastó al Brighton, un equipo habituado a hacer simples, pero bien las cosas, con aprovechar sus momentos y la angustia del Manchester United en el día en el que despedía al fallecido Denis Law leyenda a la que homenajeó en la previa. Y otra vez fue antagonista del portero, Andre Onana, retratado de nuevo en el tercer gol, el que dejó sin aliento a los ‘reds’ cuando intentaban enmendar el panorama.
Está más cerca de la parte baja el cuadro de Amorim que de la zona europea, donde se le presume. Cada jornada es peor. Sufrió su 10ª derrota de la temporada en la Premier y está a 11 puntos del Bournemouth, 6º.
Todo le sale torcido al United, que ya, de entrada, se vio amenazado por su rival, experto en aprovechar espacios y que pudo adelantarse a los dos minutos con una acción de Joao Pedro que salvó Onana. El meta es capaz de dejar atajadas espectaculares y recibir goles absurdos.
No pudo hacer nada en el que sufrió 3 minutos después, en un buen pase largo de Carlos Baleba a Karou Mitoma, que encaró la portería local y asistió a Yankuba Miteh, que, solo, llevó el balón a la red.
Tiró de orgullo el Manchester United. Sobre todo, en los pies de Bruno Fernandes, que sufre con la situación que contempla en su equipo. Pudo empatar al cuarto de hora, pero tiró desviado.
Solo fue capaz de marcar el cuadro local de penal. Absurdo, cometido por Carlos Baleba, que agarró a Joshua Zikzee de forma descarada. Lo lanzó Bruno y empató. Encontró el sosiego el conjunto de Amorim, que suspiró en un giro de la situación que no llegó. Pudo alcanzar el intermedio con ventaja porque una falta lateral ejecutada por el luso fue rematada de cabeza, solo, en el segundo palo, por Harry Maguire, pero el balón se marchó fuera.
No perdonó el Brighton tras el intermedio. Marcó en el minuto 53, pero el gol fue anulado tras la intervención del VAR. Respiró el United, que no mejoró. Y a la hora de juego, el equipo visitante ya hizo suyo el partido.
Fue en una jugada de Yasin Ayari, que abrió hacia el segundo palo donde estaba Yankuba Minteh. Este centró al segundo palo y Karou Mitoma metió la puntera y llevó el balón a la red a pesar de la oposición de Mazraoui, que llegó tarde.
Sentenció el duelo el equipo visitante a 5 minutos del final en un error de Onana de bulto. No atrapó un centro desde la derecha de Ayari y dejó la pelota a los pies de Georginio Rutter, que acababa de entrar. Recogió el regalo, lo aprovechó y firmó el 3-1 definitivo.
Fuente Besoccer / foto X