LIMA.- El presidente de Perú, Martín Vizcarra, afirmó hoy que la corrupción en su país «se agarra con uñas y dientes del Estado», y que la lucha contra ese delito es «la tarea más importante» que se ha propuesto durante su gestión.
«La corrupción no se va ir tranquilita a su casa, se agarra con uñas y dientes del Estado y no lo quiere soltar», enfatizó Vizcarra durante una visita a la localidad de Querocoto, en la región norteña de Cajamarca, donde inició obras de mejoramiento de escuelas y centros de salud.
En el lugar, el gobernante pidió a la población que se mantenga vigilante ante el desempeño de las autoridades nacionales y locales para prevenir y enfrentar la corrupción.
«Queremos una población comprometida con su futuro y su desarrollo, tenemos que hacer el esfuerzo de desterrar la corrupción que tanto daño hace al Perú. Tenemos que combatir y destruir a la corrupción, es la tarea más importante que nos hemos propuesto y eso lo vamos a hacer juntos», señaló.
Vizcarra agregó que los peruanos son honestos y, por tanto, no pueden convivir con la corrupción, por lo que es «la tarea de todos» enfrentar a este flagelo.
«El Perú tiene todas las condiciones para ser una nación grande y desarrollada, lo único que necesitamos es retirar a los malos elementos que, a través de la corrupción, no dejan que Perú progrese», dijo.
El mandatario recordó que hace un mes fue en persona hasta el Congreso para entregar los proyectos de reforma política y judicial que el pasado 28 de julio planteó que sean sometidos a referéndum.
«En vez de darle el tratamiento correspondiente, escuchamos opiniones respecto a que las reformas puede que no sean necesarias, que hay cosas más importantes, que hay que dejarlo para el próximo año; o adjetivos como que es un mamarracho, que parece un borrador… En vez de dar aportes constructivos y la celeridad del caso, vemos dilación y postergación», se quejó.
Vizcarra reiteró, en ese sentido, su pedido al Congreso, que domina el partido fujimorista Fuerza Popular, para que asuma el debate de estos temas, tras recordar que los sondeos de opinión señalan que la mayoría de la población los respalda.
«Ha pasado más de un mes y todavía ni siquiera hay dictamen. No hay sentido de urgencia. ¿Cuánto más vamos a esperar?», reiteró.
Por ese motivo, el gobernante consideró que se debe «encontrar una salida» mediante el diálogo y la concertación entre las fuerzas políticas para lograr los cambios que los ciudadanos exigen.
«Con todos voy a concertar. Con lo único que no puedo concertar es con la corrupción. Con la corrupción no converso, no dialogo… Yo la combato», enfatizó
Vizcarra añadió que, por ese motivo, asume este tema con «autoridad, coraje, valentía y respeto a la ley», y que cualquier decisión que tome va a ser con respeto a la Constitución.
«No nos vamos a salir del marco constitucional, pero eso no quiere decir que seamos débiles. Con respeto a la ley vamos a tener el coraje de hacer los cambios propuestos y que reclama la población», sostuvo.
Vizcarra anunció la semana pasada que el Ejecutivo recolectará firmas si el Congreso demora la aprobación del referéndum, con lo que recordó que la Constitución también permite recolectar las firmas válidas del 10 % de los ciudadanos habilitados para votar, en este caso 2,3 millones de personas, para hacer esa consulta.
El presidente ha mantenido durante las últimas semanas un intercambio de declaraciones con la líder de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, luego de que ésta aseguró que su propuesta de referéndum es una medida populista, una opinión que repiten sus representantes en el Congreso.
El gobernante ha pedido preguntar a la ciudadanía si se impide la reelección de congresistas y se vuelve al antiguo sistema bicameral en el Legislativo, además de la reforma completa de la judicatura, envuelta en un gran escándalo de corrupción.
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