Las trabajadoras de la industria del sexo salieron a las calles de la capital francesa para protestar contra las malas condiciones laborales.
La manifestación que empezó a las 3 de la tarde (hora local) del 8 de abril en la Plaza Pigalle, contó con la participación de entre 200 y 300 representantes de la profesión que bajo las consignas «Acaba con la hipocresía», «El negocio del sexo es un trabajo» y «Mi cuerpo es mi oficio», reclamaron mejores condiciones.
El objetivo principal de la manifestación era protestar contra la baja afluencia de clientes, la cual ha disminuido entre un 25 y 50% tras la aprobación de la ley sobre la prostitución en abril de 2016.
Esta nueva legislación penaliza a los clientes con multas de 1.500 euros que pueden duplicarse en caso de reincidencia. Además, la norma considera a las prostitutas como víctimas del comercio sexual y busca impulsar a que cambien de trabajo. (Agencias)
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