MOSCÚ.- Tras oír su llanto entre los escombros, los rescatistas lograron salvar a una pequeña de once meses bajo los restos de las viviendas y soportando temperatura de 20 grados bajo cero.
Este enternecedor rescate fue calificado como un “milagro de Año Nuevo” en medio de las penurias por el derrumbe de un edificio de apartamentos en la ciudad de Magnitogorsk, en la región de los Urales.
«La niña fue hallada gracias a su llanto durante los trabajos de búsqueda. Uno de los rescatistas la oyó y de inmediato se organizó una operación de salvamento», dijo a la agencia Interfax un portavoz del Ministerio de Rusia para Situaciones de Emergencia.
Agregó que varias decenas de especialistas participaron en la búsqueda de la bebé, que logró sobrevivir durante más de veinticuatros horas a temperaturas del orden de los 20 grados bajo cero.
La niña, que según los primero informes médico presenta un traumatismo craneoencefálico e hipotermia, fue hospitalizada en la unidad de cuidados intensivos de un centro médico local.
«Si fuera necesario, una vez que se haga una evaluación exhaustiva de su estado, la bebé podría ser trasladada a Moscú para su ulterior tratamiento», informó en un comunicado el departamento regional de Sanidad.
Según los últimos datos oficiales, en el derrumbe, que afecto a siete de las diez plantas del edificio y que fue provocado presuntamente por una explosión de gas, murieron ocho personas, otras seis resultaron heridas y 35 se encuentran desaparecidas. (ECHA- Agencias)