MOSCÚ/Rusia.- Bajo los efectos del alcohol, un hombre golpeó con una varilla metálica el cuadro del zar Iván El Terrible sosteniendo a su hijo al que asesinó, la obra más reconocida del pintor ruso Iliá Repin y que se exhibía en la galería Tretiakov en Moscú.
El zar Iván IV (1547-1584), conocido como El Terrible, es un personaje histórico a la vez oscuro y enigmático, cuyo legado político es extenso y por eso se le reconoce como uno de los creadores del Estado ruso.
Sin embargo, es al mismo tiempo, una figura iracunda y se comenta que durante su mandato se podían oír por las noches sus gritos, que resonaban por todo el Kremlin.
Era a la vez, un líder autoritario y psicópata, quien hizo ejecutar a enemigos y amigos, e incluso, en uno de esos arranques, con sus manos le quitó la vida a su propio hijo, el zarévich Iván.
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El lienzo muestra al zar horrorizado abrazando a su hijo agonizante, a quien acaba de golpear y herir mortalmente.
Durante el ataque la pintura se rompió y el lienzo se rasgó en tres partes.
«Gracias a una feliz coincidencia, la parte más valiosa -las caras y las manos del zar y de su hijo- no resultó dañada», indicaron desde la dirección del museo. (ECHA – Agencias)