MOSCÚ.- El diputado ruso, Vladimir Markin, anunció la creación de un comité que investigará el viaje lunar de los astronautas estadounidenses en 1969 para establecer si fue cierta o es una grabación hecha en un estudio.
En carta enviada al diario ruso en inglés «Moscow Times», Vladimir Markin, remarca que se investigará exhaustivamente cómo fueron los viajes espaciales históricos, sobre todo el que llevó el 24 de julio de 1969 a que Neil Armstrong se convirtiera en el primer hombre en pisar la superficie de la Luna.
https://www.youtube.com/watch?v=qCRwjOf2Cek
De esta manera, el congresista ruso se suma a las teorías conspirativas (ver videos) que aseguran que los astronautas estadounidenses nunca pisaron la Luna y que todo aquello fue una grabación realizada en un estudio de cine.
En ese sentido, Moscú oficialmente investigará qué fue de la película que grabaron los astronautas aquel día en la Luna, «o de los 400 kilos de materiales que trajeron a la Tierra y que nadie vio nunca.
“No es que digamos que el vuelo nunca tuvo lugar y que todo se rodó en un estudio. Simplemente decimos que todos esos materiales científicos e incluso culturales constituyen una herencia y su desaparición una pérdida para todos», señaló el legislador.
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De acuerdo al diario británico «The Independent», la NASA habría destruido casi 200.000 cintas porque estaban dañadas, pero que guarda en sus bases de datos las grabaciones de la llegada a la Luna gracias a videos de la cadena CBS News.
De otro lado, algunos comentaristas consideran que los rusos buscarían presionar a la Justicia estadounidense, que está detrás de la FIFA por hechos de corrupción, y evitar que se vuelva a votar por la sede de la Copa del Mundo 2018.
Para el presidente ruso Vladimir Putin sería un durísimo golpe, porque Moscú ya ha gastado miles de millones en estadios de fútbol y otras infraestructuras y porque sería un escándalo político para un país que aspira a ser considerado de nuevo una gran potencia mundial.
Moscú no piensa resignarse ante la presión que ejercen las autoridades estadounidenses, pero sobre todo británicas (Londres perdió contra Moscú la votación por la organización de ese Mundial) para que la FIFA anule aquella decisión y vuelva a votar. (ECHA- Agencias)