MOSCÚ.- En un giro sorpresivo, Dmitri Peskov, vocero del presidente ruso, Vladimir Putin, no descartó que el avión siniestrado en Egipto, donde murieron 224 personas, haya sido blanco de un atentado terrorista, hipótesis que había negado rotundamente hasta ahora.
Dmitri Peskov hizo la advertencia después de que la compañía aérea MetroJet (Kogalymavia), propietaria del avión ruso siniestrado en Egipto, asegurara que la única causa posible para que el Airbus A321 se desintegrara en el aire es «una acción mecánica exterior«.
«La única causa que puede explicarlo es una acción mecánica exterior en la aeronave», reiteró poco después a los periodistas el vicedirector general de la compañía, Alexánder Smirnov.
Agregó que «no puede haber tal conjunción de fallos del sistema que lleven a que el avión se desintegre en el aire» e indicó que el avión, que se encontraba «en excelente estado técnico«, perdió velocidad justo antes del siniestro.
«Excluimos todo fallo técnico o error de pilotaje», insistió la compañía que, en lo que pareció un apoyo a la hipótesis de un atentado terrorista, precisó que los pilotos perdieron el control «total» del vuelo KGL9268.
«Todo indica que, desde el principio de la catástrofe, la tripulación perdió el control total del avión», dijo Smirnov en rueda de prensa, tras señalar que los pilotos no intentaron entrar en contacto por radio con los controladores aéreos en tierra.
«Ahora no se puede descartar ninguna versión», señala ahora el Kremlin sobre la causa del siniestro sufrido el sábado por el avión ruso que se estrelló en Egipto, incluida la posibilidad de un atentado terrorista.
Moscú agregó que las cajas negras halladas por los equipos de socorro el mismo sábado de la tragedia se encuentran en buenas condiciones. (ECHA- Agencias)