MADRID.- El Kremlin ha rechazado este viernes las acusaciones del presidente Volodimir Zelenski sobre el presunto uso de bombas de fósforo blanco en el marco de la guerra en Ucrania desencadenada el 24 de febrero.
«Rusia nunca ha violado las convenciones internacionales», ha dicho el portavoz de la Presidencia rusa, Dimitri Peskov, quien ha dicho que «los detalles» sobre estos asuntos están en manos del Ministerio de Defensa, tal y como ha recogido el diario ruso ‘Komsomolskaya Pravda’.
Poco antes, el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov, había denunciado el uso de este tipo de armas por parte del Ejército de Ucrania en los alrededores de la capital, Kiev, según la agencia rusa de noticias TASS. Así, dijo que las Fuerzas Armadas habían empleado bombas de fósforo cerca del aeródromo de Hostomel, sin que Kiev se haya pronunciado al respecto.
Por su parte, el líder de la república rusa de Chechenia, Ramzan Kadirov, ha indicado este mismo viernes a través de un mensaje en Telegram que Ucrania empleó este armamento y ha denunciado que «los nacionalistas ucranianos y los seguidores de (Stepan) Bandera están cruzando todos los límites aceptables».
«Según expertos, las Fuerzas Armadas de Ucrania usaron cerca de un asentamiento ucraniano munición con fósforo blanco. Este caso demuestra claramente bajo órdenes de quién actúa el Ejército ucraniano, poniendo a sus propios ciudadanos en un peligro mortal», ha dicho, antes de afirmar que no descarta que Kiev acuse a Moscú de estar detrás de estos ataques.
«Tras la publicación de datos sobre laboratorios biológicos estadounidenses en Ucrania y las afirmaciones del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, sobre la probabilidad de que Rusia use armas químicas, esperamos una provocación así. Toda mentira está destinada a la destrucción y está cercana la hora en la que sacaremos a la luz a los criminales y les haremos rendir cuentas», ha remachado Kadirov.
Durante la jornada del jueves, Zelenski denunció que a primera hora del día las fuerzas rusas habían empleado «bombas de fósforo» en un ataque en la región de Lugansk (este) que había causado nuevamente muertos, entre ellos niños. La zona atacada es parte de esta región fuera del control de la autoproclamada República Popular de Lugansk.
Previamente, el jefe de la Administración Militar Regional de Lugansk, Serhiy Hadai, había indicado que las fuerzas rusas habían lanzado estas bombas de fósforo blanco contra la localidad de Rubizhne, un uso que ya fue denunciado el miércoles por el alcalde de la localidad de Irpin, situada en los alrededores de Kiev.
El alcalde de Irpin, Oleksander Markushin, aseguró que las fuerzas rusas habían usado «municiones de fósforo» en entre Hostomel e Irpin e hizo hincapié en que el uso de este armamento contra civiles es un crimen contra la humanidad y que supone una violación de las Convenciones de Ginebra.
Fuente: europapress.es